Morelia, Michoacán
Jubiloso, el 22 de julio de 2022 aquél joven de tez morena y apasionado de la política, no ocultaba su alegría de haber ganado, con voto en urnas, la elección para jefe de Tenencia Morelos y celebraba que no hubo poder que lo haya hecho bajarse de la contienda, como pasó con otros candidatos. Trece meses después, finalmente sí lo bajaron: fue asesinado a balazos.
“No nos pudieron hacer que nos bajáramos (…) Éramos 10 candidatos y a todos los hicieron que se bajara. A veces parece que puede más el poder y la corrupción que las voluntades, pero esta vez no fue así”, festejaba Caleb Rodríguez, micrófono en mano, desde la plaza principal de su tenencia.
Horas antes se habían dado a conocer los resultados del proceso electoral donde salieron a votar más de 3 mil 200 habitantes de esa tenencia, fundada hace 95 años en la zona sur de Morelia.

El conteo oficial le dio el triunfo a Caleb con mil 380 votos, suficientes para derrotar a Carolina Hernández Rangel, quien obtuvo mil 184 sufragios, y a María Yolanda Vázquez Murillo, con 570 votos para su causa.
“Ya habíamos vencido la indiferencia y ahora derrotamos la corrupción; como simples mortales, nosotros fuimos y derrotamos a esos titanes, porque a pesar de que hubo muchísimo dinero de por medio y camionetas llenas de no sé qué, les ganamos, le ganamos al poder y logramos hacer, por primera vez en Tenencia Morelos, algo diferente”, expresaba tras la victoria.
Para entonces, pocos recordaban que, a unos metros de la plaza donde Caleb y sus seguidores festejaban, se ubica una construcción que en 2015 era utilizada como casa de seguridad del crimen organizado.
El uso de esa vivienda quedó al descubierto cuando, en enero de ese año, agentes federales detuvieron en ese inmueble a Servando Gómez Martínez, alias “La Tuta”, del cártel de Los Caballeros Templarios y quien era considerado uno de los líderes más sanguinarios y mediáticos en la historia criminal de México.
La Tenencia Morelos fue el último refugio del capo michoacano, quien durante meses logró escapar de los operativos federales. En esa ocasión, aquel caserío fue noticia nacional, como este miércoles sucedió otra vez, ahora con la ejecución de su jefe de tenencia.


De acuerdo con reportes oficiales, Caleb fue interceptado por la mañana al salir de su domicilio y abatido a balazos por al menos tres sujetos, quienes tras el ataque lograron escapar.
En su cuenta de Facebook, la víctima había publicado recientemente sus condolencias por la muerte del jefe de tenencia de Chiquimitío, Rogelio Alvarado, y una galería de fotos de la semana pasada, cuando llevó elementos y patrullas de la Guardia Civil de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSP), para dialogar con los encargados del orden sobre la estrategia de seguridad.
Todavía el pasado 21 de julio, Rodríguez estrechó las manos del titular de la SSP, José Alfredo Ortega Reyes, y del fiscal general del estado, Adrián López Solís, en el marco de la celebración del primer aniversario de la Guardia Civil, sin saber que sus días estaban contados.
A éste último, le pidió llevar a la Tenencia Morelos un módulo para la recepción de denuncias sobre posibles hechos delictivos, pero el proyecto ya no se concretó. Al menos no con Caleb en vida.




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