Ciudad de México.- La tragedia del Colegio Enrique Rébsamen, donde 19 niños y siete adultos murieron el pasado 19 de septiembre, se pudo evitar.
Una serie de peritajes que realizaron especialistas de la Procuraduría General de Justicia (PGJ) de la Ciudad de México revelaron que el penthouse que Mónica García Villegas, dueña y directora, mandó construir en el cuarto nivel provocó el derrumbe de una parte del plantel.
Este departamento que tenía un peso de casi una tonelada. Miss Mónica le agregó porcelonato, en algunas secciones granito y además la tina de baño, materiales que la estructura original no aguantó; esto provocó que con el movimiento telúrico los castillos se vencieran y el edificio se deslizara hacía la parte donde los alumnos, maestros y empleados se concentraron precisamente para salvarse de un derrumbe.
Fuente: El Universal