Foto: Twitter @lopezobrador_

Lo diré de manera simple: el populismo es lo que define a quien desprecia a las élites, porque asegura que están corrompidas por “la buena vida” de inspiración occidental.

Por supuesto que, desde mi perspectiva, el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador es un populista con gran resentimiento por aquellos que son de una clase “burguesa”, por aquellos que son intelectuales y por quienes han logrado riqueza material y gran movimiento social hacia el progreso occidentalizado, es decir, gracias al capitalismo.

Pero el populismo va más allá.

No solo se trata de personas que desprecian a los que progresan. El populismo tiene otros factores que lo caracterizan, y el profesor de Princeton Jan-Werner Müller los enlistó y aquí los resumo:

  1. El exclusivismo: El populista cree que solo hay un “nosotros” que son los representantes del pueblo. Los demás son enemigos del pueblo.
  2. El caudillismo: Se cultiva el aprecio a un líder que interpreta la voluntad popular.
  3. El adanismo: La historia comienza con ellos, con su movimiento y lo anterior son puras traiciones al pueblo.
  4. El nacionalismo: Es una creencia que conduce al proteccionismo y aislacionismo del mundo. El populista no gusta de conocer el mundo.
  5. El estatismo: El Estado planifica el crecimiento y lo que colmará las necesidades del pueblo.
  6. El clientelismo: Se concibe para generar millones de estómagos agradecidos.
  7. La centralización de todos los poderes: El caudillo controla los poderes públicos.
  8. El control y manipulación de los agentes económicos: Se procura controlar el Banco Central.
  9. El doble lenguaje: La semántica se convierte en el campo de batalla.
  10. La desaparición de cualquier vestigio de cordialidad cívica: Se utiliza un lenguaje de odio que muestra la agresión.

Si usted lo medita, se dará cuenta que López Obrador y algunos de sus “amigos” dentro del movimiento (MORENA) piensan esto y así actúan, porque el populismo en sí no es una ideología política, sencillamente es una estrategia para llegar al poder, conservarlo y hacerlo más grande.

El peligro de Obrador y quienes actúan así, es que para fondear este esquema de conquista del poder saquean los recursos del país para pagar favores a cambio de preferencia electoral, pero los recursos no son infinitos.

Tarde o temprano mermarán y tú o tus descendientes tendrán que pagar como ya sucedió en Venezuela, Cuba, Bolivia y en otros países.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí