Morelia, Michoacán
Al mero estilo del fascismo, el dirigente nacional del PAN, se asemeja a posturas de Augusto Pinochet y Adolfo Hitler, al proponer la destrucción de los nuevos libros de texto de la SEP, aseguran los 22 gobernadores de Morena del país.
Luego de que el dirigente nacional panista invitara a la población a destruir los libros de texto, los gobernadores guindas saltaron para defender el nuevo paradigma educativo que se encuentra en el ojo del huracán, pues hay voces que los tildan de ideologizante.
A través de un manifiesto firmado por los 22 mandatarios estatales, éstos criticaron la visión del político panista, representante de la oposición.
“En pleno arranque del siglo XXI estas fueron las palabras de Marko Cortés en la entrevista con Ciro Gómez por la mañana: la propuesta es que los padres de familia destruyan los libros en su totalidad… o una parte de ellos”, señala el documento.
Los gobernadores refieren que “no se podía esperar mucho de la derecha conservadora del país”, la cual, dicen, queda evidenciada como retrógrada.
“Vale la pena recordarles que esa actitud de destrucción de libros fue impulsada y llevada a cabo por los personajes más siniestros de la historia reciente de la humanidad. Adolfo Hitler mandó a quemar libros hace 90 años, el dictador Pinochet en Chile hizo lo mismo, inmediatamente después del golpe de Estado que lo llevó a usurpar el poder; es decir, siempre que se quiso impedir el avance democrático, cultural y humanístico de la sociedad, se impulsó la destrucción de libros”, señalan en su manifiesto.
El documento añade que la derecha pretende ignorar el papel trascendental de los libros de texto gratuitos, pues se opone al desarrollo integral de niñas y niños desde el conocimiento científico, histórico, cultural y humanístico.
“Con pretextos banales y faltos de argumentos convincentes, la oposición se opone a la distribución de los textos para la educación formal porque de fondo saben que un pueblo educado y bien informado no será susceptible de engaños ni podrá ser manipulado, ya no podrán retenerlo eternamente en la ignorancia para ser explotado”, resalta el documento.
El manifiesto lo firmaron las gobernadoras de Campeche, Baja California, Guerrero, Quintana Roo y Colima, así como los gobernadores de Michoacán, Oaxaca, Chiapas, Hidalgo, Morelos, Nayarit, Puebla, Sonora, Sinaloa, Tamaulipas, Tlaxcala, Zacatecas, San Luis Potosí, Tabasco, Veracruz y el jefe de gobierno de la Ciudad de México.
