Zamora, Michoacán
Aburrido de los formatos tradicionales en la realización de los informes de gobierno, el alcalde de Zamora, Carlos Soto, quiso apostar por un esquema más relajado: se le vio vestido informal, de tenis blancos, pantalón casual y camisa a cuadros arremangada.
“Yo creo que ya nos enfadamos de esos formatos donde vas y te sientas tres horas a estar escuchando al presidente municipal y luego hablan los regidores. Ya nos enfadamos de eso, ya no se pone atención”, explicó el edil en entrevista.
Una noche antes, Soto había rendido su primer informe de gobierno desde el Teatro Obrero de esta ciudad de Zamora, apoyado en un telepronter a tres monitores, para ir leyendo sus líneas.
El alcalde panista dejó el tradicional traje y corbata que suelen usar los gobernantes en este tipo de actos protocolarios, y se inclinó por un outfit totalmente informal.
A sus espaldas, una pantalla gigante fue proyectando videos con los testimonios de personas beneficiadas por los programas municipales, así como imágenes fotográficas y números con los datos duros de los logros de este primer año en el poder.
“Hoy el futuro de la política es la inclusión de la ciudadanía a todos estos informes, a toda esta rendición de cuentas. Y esa cercanía no la ven cuando tenemos formatos en sesiones solemnes, donde ven a un presidente que se ve más alto que todos, con una silla especial, con un escritorio especial.
“Había que cambiar esa forma y platicar de resultados. Esto fue una plática, no un informe. Quisimos dejar muy claro, mediante videos, fotografías y datos, qué es lo que se está haciendo”, comentó.
Al evento llegaron el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla, el líder nacional del PAN, Marko Cortés y el secretario del Ayuntamiento de Morelia, Yankel Benítez, en representación del alcalde Alfonso Martínez, entre otras figuras de la política y el gobierno.
