Londres, Gran Bretaña
Se ha hecho viral en las redes la historia de Oli Weatherall, un británico de 22 años que padece una alergia severa que le impide besar a las chicas, porque, de lo contrario, podría tener graves problemas de salud como un shock anafiláctico e incluso la muerte.
El joven es alérgico a los cacahuetes y ha sido hospitalizado después de comer un poco de mantequilla.
Oli, después de haber pasado por estos episodios dijo:
«La sensación de morir por una crisis respiratoria es terrible, se siente fatal y no se lo deseo a nadie».
En la actualidad, él ha decidido ser muy cuidadoso con todo lo que le rodea, incluso cenar fuera de casa representa una amenaza para su salud, al igual que viajar, y muchas otras cosas actividades, entre ellas, dar un beso.
El joven evita besar a alguien, porque sabe muy bien que basta con un beso para complicarlo si la otra persona acaba de comer algún alimento «contaminado».
O sea que Oli debe asegurarse de que la otra persona no comió ningún alimento amenazante antes de lanzarse a un acercamiento romántico.
