Ciudad de México – El Universal
No es frecuente que las personas tengan la oportunidad de darle a alguien el regalo de la vida, pero eso es exactamente lo que se ofrece al decidir ser un donante vivo de riñón. Lamentablemente, la cantidad de personas que necesitan un trasplante supera con creces la cantidad de donantes.
Según datos del Centro Nacional de Trasplantes (Cenatra), en México hay más de 15 mil personas en lista de espera para recibir la donación de un riñón, lo que convierte a este órgano en el de mayor demanda. Los tiempos de espera son además prolongados, pudiendo llegar a los 10 años.
De acuerdo a Mikel Prieto, M.D., cirujano de trasplantes de Mayo Clinic, encontrar un donador vivo suele ser la mejor opción: “Una espera larga es especialmente difícil para los pacientes que se someten a diálisis varias veces a la semana. Y cuanto más tiempo espera un paciente un riñón, más probabilidades hay de que su salud continúe deteriorándose”.
Por esto, especialistas de Mayo Clinic comparten 5 cosas que debemos saber sobre ser un donador vivo de riñón:
No tenemos que estar relacionados con alguien para ser donante
Cualquiera puede ser un donador vivo de riñón, independientemente de si estaríamos ayudando a un pariente, amigo, conocido o un desconocido. Todos los donantes potenciales deben ser mayores de edad y son sometidos a una evaluación médica exhaustiva.
¿Quieres donar a alguien, pero no eres compatible? Hay otra opción
A veces, un donador potencial no es la mejor opción para un receptor (familiar o amigo). En esas situaciones, se considera la donación pareada, emparejando a donantes y receptores, creando una “cadena renal”.
No tenemos que conocer a alguien que necesita un trasplante para ser donador
Para las personas que desean ayudar a alguien que necesita un riñón pero no tienen en mente a un receptor en particular, pueden elegir una donación no dirigida, que también se conoce como donación altruista. Se analizará la compatibilidad médica e inmunológica de las partes involucradas.
La cirugía es mínimamente invasiva
Al donar un riñón, los donantes se someten a una cirugía laparoscópica, un procedimiento que consiste en hacer algunas incisiones pequeñas en lugar de una más grande. Este tipo de intervención reduce el tiempo de recuperación. La mayoría de los donantes de riñón vuelven a sus actividades o trabajos a las pocas semanas de la operación, dice el Dr. Prieto. Al igual que con cualquier cirugía, existen riesgos, y es importante que se discuta sobre ellos con su médico.
Los donantes viven tanto tiempo como quienes no han donado
Para someterse a esta cirugía, la persona debe ser considerada saludable. Si un donante vivo de riñón necesita un trasplante de riñón más adelante en la vida, se le da prioridad al donante de riñón vivo para acortar el tiempo en la lista de espera de trasplante.
“Sabemos que los pacientes que reciben un riñón de un donador vivo tienen mejores resultados a corto y largo plazo que aquellos que no lo hacen, brindándoles la mejor oportunidad de regresar a una vida plena y productiva vida “, concluye el doctor Prieto.