Morelia; Michoacán.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, son 800 mil personas las que se suicidan cada año, lo que se traduce en una tasa estimada de 11.4 muertes por cada 100 mil habitantes, informó la diputada Sandra Luz Valencia, quien presentó una iniciativa en la cual se propone implementar el Protocolo de Actuación para la Prevención y Tratamiento de la Conducta Suicida, a través de la Secretaría de Salud de Michoacán (SSM).
Con base en el contenido de la iniciativa, puntualizó la diputada local por Morena, la Secretaría de Salud tendrá un plazo de noventa días contados a la entrada en vigor del presente Decreto, para emitir el Protocolo de Actuación para la Prevención y Tratamiento de la Conducta Suicida.
“La iniciativa que presento, es un llamado a que juntos, la familia, la sociedad y las instituciones públicas y privadas, generemos acciones colectivas para lograr niveles más altos de salud y bienestar mental en la entidad”, enfatizó la legisladora por el Distrito 23 de Apatzingán.
Remarcó que, “para el abordaje de este grave problema de salud, se requiere mejorar la formación de los profesionales de la salud y de los responsables sociales en salud mental; vigilar el acceso a los métodos suicidas en las instituciones educativas, poner en marcha medidas que incrementen la concientización sobre salud mental en la población, implementar medidas para reducir los factores de riesgo suicidas, como la violencia en todas sus manifestaciones, el consumo excesivo de albohol el abuso de drogas, el sedentarismo, la exclusión social, la depresión y el estrés”.
En el caso específico de Michoacán, subrayó que en lo que va del año el suicido se ha incrementado un cien por ciento en comparación con años anteriores, pues hasta el mes de mayo, se han registrado 122 suicidios, según datos que reporta la Fiscalía General del Estado y medios locales, por lo cual, sostuvo, es urgente emprender acciones para proteger a nuestra población más vulnerable, ante el riesgo de suicidio que está al alza.
Concluyó al señalar que, “cualquier persona puede ser víctima de enfermedades depresivas que desequilibren su estado emocional y que impliquen un riesgo de suicidio, para toda enfermad mental es tratable, con la intervención especializada, por lo que es necesario cambiar la concepción sobre lo que es la salud mental, ya que es necesaria para una población donde el estrés se ha convertido en una de las principales causas de múltiples enfermedades”.