Antonio Rojas Ávila
Morelia, Michoacán.- Por segunda vez consecutiva las Águilas del América eliminaron a su archirrival con un partido en el que, en la propia sede tapatía, establecieron su supremacía.
En medio del escándalo por el supuesto plagio del himno por el primer Centenario del Club América, el equipo de Coapa viajó hasta Guadalajara a desbaratar la ventaja que Chivas había conseguido el viernes pasado en el partido de ida en el Azteca, en donde el Rebaño logró sacar un empate 1-1 a base de fuerza y tesón, y cortesía de la falta de sintonía de los americanistas. Los tapatíos lo tenían todo para resolver su pase en el Omnilife.
Sin embargo, este domingo decisivo la seguridad de manos del moreliano Moisés Muñoz fue fundamental para mantener a los rojiblancos inoperantes, como se les vio durante todo el partido, pues ya sea por la solidez defensiva que mostraron las Águilas, o por la propia falta de futbol que exhibieron los de Guadalajara, no lograron hacer sentir sus pasos en la portería del michoacano en este encuentro eliminatorio, especialmente en el primer tiempo, donde fueron dominados por un Club América sediento de gol.
Un gol de cabeza a los 54 minutos, fruto de un espectacular movimiento de Oribe ‘El Cepillo’ Peralta, bastó para que el América sellara su pase a la semifinal de la Liga MX, pues las Chivas nunca encontraron el norte y la defensiva americanista se convirtió en una muralla infranqueable para sus aspiraciones, a pesar de que les hubiera bastado un solo gol para revertir la situación, toda vez que ante el empate 1-1 obtendrían el pase por su posición en la tabla.
Ricardo Lavolpe combinó un notable orden en su escuadra, con la ferocidad de sus delanteros y su principal creativo, Darwin Quintero, para hacer realidad el triunfo de América en el superclásico mexicano.
Para el olvido fue la actitud de la hinchada del ‘Rebaño Sagrado’, que desde el gol de los de Coapa se dedicó a lanzar desde las tribunas cuanta basura tuvieron a mano, convirtiendo en proyectil su frustración y coraje, que en nada pudo ayudar a la clara inferioridad futbolística de su equipo, que quedó fuera del Torneo Apertura de la liga mexicana de Primera División de futbol profesional.