Chilchota, Michoacán
Sujetos armados despojaron de forma violenta de su camioneta al diputado federal del PAN, Enrique Godínez del Río, cuando circulaba por la carretera Zamora-Chilchota, a la altura de la población de Tacuro.
De acuerdo con el reporte la noche de ayer lunes, el diputado viajaba en su camioneta de la marca Teramont, junto con sus colaboradores, quienes habían asistido a un evento político en el municipio de Uruapan, donde estuvo Xóchilt Gálvez, precandidata presidencial del PAN, PRI y PRD. Al término del evento, el diputado se encaminó al municipio de Zamora, donde tiene su domicilio, acompañado de otro vehículo que lo seguía.
Iba con tres de sus colaboradores, y al circular sobre la carretera Zamora-Chilchota, a la altura de la población de Tacuro, fueron interceptados por sujetos armados que los amagaron con armas de grueso calibre y los obligaron a bajar de la unidad. Los delincuentes se llevaron la camioneta y abandonaron al político y a sus tres acompañantes sobre la carretera.
Los tripulantes del segundo vehículo, al perder el contacto con el diputado federal, solicitaron apoyo del personal de la Fiscalía General del Estado de Michoacán (FGE), quienes realizaron un operativo en la zona. Tras un recorrido por la carretera lograron ubicar al diputado Enrique Godínez del Río y a tres personas más que los acompañaban, sobre la orilla de la carretera.
De inmediato los auxiliaron y trasladaron a sus respectivos domicilios en el municipio de Zamora. Al momento los afectados no han presentado denuncia penal por el robo violento que sufrieron al ser despojados de la camioneta.
El legislador no ha emitido ninguna postura sobre el asalto del que fue blanco en los caminos de Michoacán, donde el día de los hechos presumió, en redes sociales, el interior de la unidad que más tarde le robarían. Se mostraba contento y emocionado de ir al encuentro de Gálvez.
“Cerramos con todo la precampaña de nuestra precandidata única a la Presidencia de México. Estamos caminando en unidad por el bien del país”, posteó antes del mítin, sin saber que, caminando, lo dejaría más tarde la delincuencia.