Morelia, Michoacán
Mientras que algunos legisladores arcoíris de Morena piden justicia o dicen temer por su vida tras el homicidio de la activista trans Samanta Gomes, otros minimizan el hecho o simplemente guardan silencio.
Samantha Gomes, precandidata de Morena al Senado, fue asesinada este domingo 14 de enero cuando salía de visitar un penal y mientras que la diputada federal Salma Luévano dice temer por su vida; Celeste Ascencio, quien también aspira al Senado por la cuota LGBT, dice no estar segura de que se trate de un crimen de odio. Maria Clemente García, por su parte, no ha publicado absolutamente nada del tema.
“¿Qué está sucediendo en México, por qué llevamos cuatro muertes violentas en lo que va de este 2024 de mujeres trans?”, se preguntó Salma Luévano.
Una vez más, dijo temer por su vida porque ha recibido amenazas, razón por la que hace días pidió una audiencia con el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien tuvo que disculparse públicamente por haberse referido a ella en la mañanera como “señor vestido de mujer”.
“Nuestras vidas también cuentan. Temo por mi vida pero no callaré y seguiré adelante levantando la voz”, insistió la legisladora.
En contraste, la michoacana Celeste Ascencio consideró que es muy lamentable lo que ha ocurrido, pero que no se puede afirmar que se trate de un transfeminicidio:
“Muy lamentables todos los hechos que están ocurriendo, que desconocemos si sean por crímenes de odio, homofobia, o por cuestiones políticas”.
Expuso que tanto ella como su compañero de fórmula, Raúl Morón, han solicitado a la Fiscalía General del Estado que realice las investigaciones que correspondan para determinar la causa del asesinato de Miriam Ríos, otra activista trans, en este caso militante de Movimiento Ciudadano, que fue asesinada apenas la semana pasada.
El diputado local de la Ciudad de México Temístocles Villanueva, también identificado con la comunidad diversa sexual, fue el primero en pronunciarse por su compañera de partido y lamentó que “de manera cobarde” se le haya agredido.
El grupo parlamentario de Morena en la Ciudad de México emitió una esquela.
A nivel nacional, Morena también lo lamentó.
López Obrador, por su parte, no mencionó el homicidio ni publicó nada al respecto, como tampoco lo hizo su precandidata presidencial, Claudia Sheinbaum.
Hace unos días, Samanta Gomes defendió a Andrés Manuel López Obrador cuando malgenerizó a Salma Luévano, dijo que fue un “disparate” y “se le chispoteó”, cuando le dijo “hombre vestido de mujer”, que desde su perspectiva no fue transfobia pero sí parte de un discurso discriminatorio.
La misma actitud del Presidente de la República fue la que asumió Morena a nivel local, pues su dirigente no se pronunció aun cuando se le preguntó directamente del tema durante la rueda de prensa que ofreció este lunes 15.
Los diputados locales que llegaron por cuota arcoíris de la alianza Morena-PT en 2021, Brenda Fraga y Fidel Calderón, esta vez tampoco se pronunciaron, como tampoco lo hicieron con Miriam Ríos.
Antes de ser militante en Morena, Samantha Gomes perteneció al partido Nueva Alianza y fue candidata a una diputación federal en 2018 y antes de eso, en 2016, a una diputación constituyente.