Al menos 103 personas murieron y 141 han resultado heridas en dos explosiones que se produjeron en Kerman, en el sureste de Irán, durante la conmemoración del cuarto aniversario de la muerte del general Qassem Soleimani.

Miles de personas se habían congregado cerca de la mezquita Saheb al Zaman, donde se encuentra la tumba de Soleimani, situada a unos 820 kilómetros al sureste de Teherán, para rendir homenaje al exjefe de los Guardianes de la Revolución, asesinado hace cuatro años en un ataque con drones estadounidenses en Irak.

Soleimani fue el arquitecto de la política exterior iraní en Oriente Medio y responsable del apoyo de ese país a Hamas, a la milicia libanesa Hizbulá y a los rebeldes hutíes de Yemen.

Según la televisión estatal de Irán, varias bombonas de gas provocaron dos explosiones en la carretera que conduce al cementerio donde se iba a rendir homenaje al general.

Rahman Jalali, vicegobernador de la provincia de Kerman, declaró en la televisión que las bombas fueron “un atentado terrorista”.

Por su parte, la agencia Tasnim, semioficial y vinculada con la Guardia Revolucionaria, basándose en fuentes sin identificar, habla de dos bombas activadas por control remoto.

La televisión estatal mostró a los rescatistas de la Media Luna Roja atendiendo a los heridos tras las explosiones.

Los sucesos de este miércoles se producen en un momento de máxima tensión en la región, horas después de que un dron israelí matara en Beirut, al número dos del brazo político de Hamás, Saleh al Arouri.

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