Foto: ACG

Durante los dos actos que encabezó la precandidata de Morena a la presidencia, Claudia Sheinbaum, estuvo flanqueada únicamente por miembros de su equipo y dirigentes estatales de los partidos de la coalición. A gayola se fueron los aspirantes al Senado, diputados y presidentes municipales.

Gerardo Fernández Noroña, coordinador de enlace con organizaciones sociales y civiles, Juan Pablo Celis, dirigente estatal de Morena, Reginaldo Sandoval, dirigente estatal del Partido del Trabajo (PT) y Ernesto Núñez, dirigente estatal del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), acompañaron a la precandidata en el escenario en Zacapu. En Pátzcuaro se incorporaría Ricardo Monreal, coordinador territorial.

Entre la militancia, se alcanzaba a divisar a Carlos Torres Piña, Giulianna Bugarini y Fabiola Alanís, entre otros precandidatos registrados, presidentes municipales y otros actores políticos, a los que Sheinbaum dedicó un saludo impersonal al inicio de su discurso y un mensaje entreverado en el discurso, cuando expresó que el proyecto está por encima de las aspiraciones personales.

Foto Alfredo Soria/ACG

Durante sus discursos, que fueron prácticamente idénticos en sus dos presentaciones, comenzó hablando de su experiencia en Cheranástico cuando hizo sus prácticas profesionales de licenciatura, para después exponer las bondades del gobierno -porque dijo que no le gustaba llamarlo “administración”-, de Andrés Manuel López Obrador, con énfasis en la pensión para adultos mayores.

Después criticó al Instituto Nacional Electoral (INE), al decir que “sus reglas” son absurdas, porque no le permitía hacer propuestas de gobierno durante la precampaña, a pesar de que esta disposición está contemplada en las leyes y no fue generada por el órgano electoral; sin embargo, dijo que para no hablar de “propuestas” hablaría de “sueños”, y entonces presentó sus propuestas: continuar con el impulso a los trenes de pasajeros y dotar de una beca a todos los niños del país que cursen primaria y secundaria, “para que las mamás no se preocupen”.

En Pátzcuaro, no soltó su bastón de mando en ningún momento y dijo que se lo había otorgado el mismo López Obrador, dando un contexto de su significado. Además, destacó y agradeció la presencia de Ricardo Monreal de manera particular, sin mencionar en nigún momento a los coordinadores de los Comités de Defensa de la Cuarta Transformación aunque sí alcanzó, de pasadita, cuando se retiraba, a saludar a Fabiola Alanís, extitular de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia (Conavim).

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