Pocos políticos pueden presumir de haber ‘jineteado’ de un gobierno del PRI a uno del PRD y otro del PAN, sin caer del caballo y mantener su militancia original. Es el caso de Gerónimo Color, actual secretario general del Consejo Ciudadano en Morelia, priista de siempre, operador político en una retahíla de campañas y un activo referente de la charrería.

Y es justamente en los caballos, en los que se inspira para explicar la fórmula que lo ha mantenido vigente en cada una de las suertes que, hablando en términos de la charrería, han significado las transiciones de las últimas décadas en el país y en el estado.

“El caballo siempre, en su inteligencia y en su nobleza, está esperando que lo conduzcas con mucha firmeza y no permite error, y en los temas de orden político es igual: tienes que tener mucho temple para tomar decisiones políticas, sabiendo las implicaciones y los costos que tiene”, explica quien ha sido director de Gobernación, subsecretario de Desarrollo Rural, titular de Liconsa y delegado de la extinta Secretaría de Desarrollo Social.

No es sencillo, por supuesto, y sobre todo a veces no es comprendido el por qué se toman decisiones, pero, en lo personal para mí ha sido la convicción y la decisión de que primero es México y primero es Michoacán, y cuando tú ves que en una decisión hay en riesgo muchas cosas tienes que buscar cómo contribuir. Yo me siento orgulloso de haber sido una gente con una visión clara desde hace años, de que había que consolidar una alianza política entre las principales fuerzas del país, que hoy está materializada y que ha permitido tener equilibrios muy importantes en decisiones trascendentes para México en momentos claves.

Quienes hemos tenido la oportunidad de ganar en la política, pero también de vivir momentos amargos cuando se sufren derrotas, entendemos la importancia de la pluralidad, y Michoacán es un estado plural donde no hay victorias ni derrotas eternas, en donde tenemos que aprender a construir diálogos y donde lo que más genere una visión conjunta es lo que debe priorizarse.

Así es, y creo que en esa ruta tendremos que poner lo que esté de nuestra parte como ciudadanos para seguir impulsando el cuidado fundamental de la democracia. Ya hemos visto que hay tentaciones de retrocesos a otros tiempos que fueron muy lastimosos para la democracia en México, y entonces tenemos que impulsar el diálogo y el acuerdo político para poder alejar a México de esas tentaciones, con acuerdos muy claros, que garanticen el respeto a las instituciones que le dan certeza a la vida democrática.

Nunca he dejado de ser priista. Soy de la gente que ha militado en el PRI siempre, de lo cual me siento muy orgulloso y siempre he pensado en el bien de mi estado, en el bien de mi municipio y por supuesto en el bien del país.

Como todos los partidos políticos, estamos viviendo transformaciones internas. Hay, a partir del año 2018, un proceso que impactó a todos los partidos, y se repitió en el 2021. Yo creo que hoy el PRI está enfrentando grandes retos, en donde ha habido una salida de militantes y yo no comparto eso de decir ‘pues que se vayan’, sino que hay que entrar en un análisis profundo y ver por qué unos se van y por qué otros dejan de participar. Hay una militancia muy amplia que no está participando y que no han dejado de ser priistas, y eso hay que reflexionarlo.

Hoy es un momento clave en la historia del país, en donde todos tenemos que hacer gala de la política buena, la del diálogo, la del respeto. No estamos obligados a pensar igual, pero sí estamos obligados a tener una altura de miras que fortalezca un proyecto de nación. Hoy, la sociedad civil y los partidos políticos tenemos que construir un gran proyecto que sea atractivo para el país, y creo que es el momento de que las dirigencias tienen que ser muy reflexivas para generar unidad y que cohesione un proyecto que sea altamente competitivo para darle a México la grandeza que merece.

Todo el que hace política está pensando cómo contribuir. Yo hoy tengo una responsabilidad que me honra mucho, que me confió el presidente municipal (Alfonso Martínez), que es la de hacer del Consejo Ciudadano un organismo fuerte, que le de mucha certeza a Morelia. Justo en el tema de paridad, por primera vez el Consejo está integrado equitativamente entre mujeres y hombres, con una presencia muy relevante de jóvenes. Estamos trabajando con mucha intensidad para consolidar esto, es en lo que estoy centrado y acompañando el proyecto de un municipio que está haciendo las cosas muy bien.

Seguramente estaremos acompañando al ingeniero Alfonso Martínez para que consolide un municipio de cara al futuro. En política he aprendido que debe estar uno siempre listo, de cómo servir y cómo contribuir a las mejores causas, en este caso en Morelia, en Michoacán y en el país.

En que es un arte, de entrada.

Que requiere de mucha observación y de mucha determinación.

Yo creo que van de la mano. El caballo siempre, en su inteligencia y en su nobleza, está esperando que lo conduzcas con mucha firmeza y no permite error, y en los temas de orden político es igual: tienes que tener mucho temple para tomar decisiones políticas, sabiendo las implicaciones y los costos que tiene, no solamente cuando tienes la responsabilidad de una institución o de un organismo político, sino que también hay decisiones que trastocan en lo personal, y el arte está en gran medida también en no tomarlo personal y entender que son circunstancias, entender que aparece la condición humana y que muchas veces te toca comprender esas condiciones humanas.

Cuando uno crece, te toca comprender que mucha gente cuando en política te agrede, pues es lo que tiene para dar, y uno tiene que dar siempre mucha generosidad, tiene que tender la mano, porque las cosas pasan, los tiempos de un encargo político vuelan y uno aquí está, y cuando aspiras a estar en tu tierra, tienes que entender todas esas cosas.

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