Morelia, Michoacán
En finanzas estatales, se pasó de “chiflar en la loma al milagro financiero”, destacó el gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla en el marco del Segundo Informe de Gobierno.
En el Congreso del Estado, el mandatario estatal enfatizó el cambio en la estabilidad financiera del estado, que ha pasado de enfrentar graves problemas a convertirse en un motor de desarrollo.
Ramírez Bedolla señaló que el neoliberalismo, que se había presentado como la única opción, fue una gran estafa, ya que se les dijo que no había recursos para el crecimiento de Michoacán, lo que implicaba recurrir a la deuda o la concesión de servicios públicos a privados.
El mandatario estatal mencionó que, la corrupción estaba vinculada a la privatización del Estado mexicano como un problema adicional que llevó al “despeñadero”. Destacó que su administración ha invertido más en obra pública que en el pago de la deuda, a pesar de las tasas de interés en aumento.
“Pasamos de un presupuesto estatal real de 68 mil millones en 2021, a un presupuesto efectivo de 101 mil millones en 2023; es decir, un aumento de 44%”, precisó.
Asimismo, Ramírez Bedolla puntualizó que sin adquirir deuda a largo plazo, se pagaron cinco mil 100 millones de pesos en deudas heredadas: al IMSS dos mil 300 millones, a Pensiones Civiles 500 millones, así como a proveedores y prestadores de servicios.
Elogió al Secretario de Finanzas y Administración, Luis Navarro García, por su trabajo en la estabilidad financiera del estado, y enfatizó que la corrupción había sido el principal obstáculo para Michoacán.
