Morelia, Michoacán
Este lunes 28 de agosto, iniciarán las clases para poco más de 900 mil de estudiantes del nivel básico en Michoacán, momento que estará marcado por la polémica generada por los libros de texto editados por la Secretaría de Educación Pública (SEP) para el ciclo escolar 2023 a 2024.
Estados como Chihuahua, Yucatán, Jalisco, Nuevo León, Aguascalientes, Guanajuato y Coahuila se ha manifestado abiertamente el rechazo a los materiales, derivados de la Nueva Escuela Mexicana (NEM), entre acusaciones de adoctrinamiento, errores múltiples e imprecisiones e insuficiente información sobre matemáticas, mientras que en áreas de Chiapas incluso se ha procedido a la quema de libros.
Libros de texto arriban a Michoacán
La Federación ha destinado más de 3 millones de libros de texto a la entidad, de acuerdo con la Secretaría de Educación en el Estado (SEE).
Al momento, 96 por ciento de estos materiales que se utilizarán en las escuelas primarias, y se encuentra en curso la distribución en las secundarias y telesecundarias.
Esto, luego de que en semanas pasadas arribaran al estado los libros de texto para las escuelas primarias y en breve se entregarán los correspondientes a las secundarias.
La SEE detalló que por ahora no se han recibido libros de texto rechazados por otros estados, aunque la petición del gobierno de Michoacán para su reasignación continúa vigente.
En el caso de Michoacán, el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla no solo ha aceptado la entrega de los libros de texto, sino que aseveró que solicitará a la Federación se le asignen a la entidad aquellos que otros estados no reciban, a fin de destinarlos a escuelas en comunidades rurales.
Aunque en un primer momento afirmaron darían prioridad a materiales propios, docentes adscritos a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) señalaron, luego del Taller del Educador Popular, su disposición a incorporar los libros de texto a las aulas.
Tanto Jairo Mandujano como Eva Hinojosa, dirigentes de 2 de las 3 alas de la CNTE en Michoacán, señalaron que los libros editados por la SEP no se contraponen con los objetivos del modelo impulsado por la coordinadora para la educación básica.
Agregaron que, no obstante, no será una aplicación a raja tabla, ya qur aún se requiere de dialogar con los padres de familia.
Los que están en contra de los libros
En contraste, la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en Michoacán ha expuesto que los materiales en cuestión se encuentran en la irregularidad, debido a que en su elaboración no se ha seguido el debido proceso.
El dirigente de la Coparmex en la entidad, David Luviano, afirmó que para la edición de los libros de texto para el ciclo escolar 2023 a 2024 no se consultó a especialistas, docentes o padres de familia.
Además, se fundamentan, aseguró, en un plan de estudios que no ha sido publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF).
Por su parte, el presidente municipal de Morelia, Alfonso Martínez Alcázar, expuso que los materiales son “aberrantes”, puesto que están encaminados a la formación de personas no críticas y que enfrentarían riesgo de tener carencias graves en asignaturas como matemáticas y lenguaje.
Las cifras
De acuerdo con la Federación, se dispone de poco menos de 100 millones de libros de texto en almacenes de los 32 estados del país
La pretensión es que sean distribuidos en más de 228 mil centros educativos, para su uso por 42 millones de estudiantes y 1.2 millones de maestros.
Y a pesar de que el arranque del ciclo escolar ha sido para Michoacán un instante históricamente complejo, en esta oportunidad el fenómeno se extiende al territorio nacional.
La jueza de distrito Yadira Medina emitió una orden para suspender la distribución de los libros, por el desacato de la SEP de la Ley General de Educación, al no estar publicado el plan de estudios que les sustenta, en tanto que los estados de México, Chihuahua y Coahuila disponen de suspensiones provisionales para no entregar los materiales.
En el país se estima que se interponen más de 2 mil 200 amparos, promovidos por la Unión Nacional de Padres de Familia, y madres de familia anunciaron una marcha para el próximo 17 de septiembre, en Ciussd de México, en contra de la distribución y aplicación de los materiales.
