Por un tuit, Morena ya no podrá usar los “Amlitos”

Ciudad de México

Siempre hay un tuit… y uno de ellos le costó a Morena que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación le prohíba, en adelante, utilizar los muñequitos o figuras caricaturizadas del presidente Andrés Manuel López Obrador, creados en 2005, en sus campañas políticas.

La magistrada Gabriela Villafuerte tomó un tuit publicado en la cuenta oficial de Morena el 29 de mayo de 2022 para fundamentar su teoría de que el uso de los “Amlitos” ha sido un factor de inequidad en los procesos electorales.

“Sonríe, este 5 de junio ganamos 6 de 6 para Morena. ¡Buenos días para todas y todos!”, se leía en el posteo, emitido una semana antes de la jornada electoral donde Morena ganó, finalmente, cuatro de las seis gubernaturas.

En su resolutivo, Villafuerte reflexionó que dicha caricatura permite identificar claramente que se trata de la figura de López Obrador, “quien, además, es un servidor público conocido y reconocido por toda la ciudadanía, no solo por el cargo que ocupa, sino también por la dinámica de comunicación diaria que realiza”.

Para la magistrada electoral, el uso de los “Amlitos” en productos como peluches, broches, figuras de plástico, calcomanías, llaveros y otros, denotaron expresiones de simpatía hacia López Obrador en las campañas presidenciales del 2006, 2012 y 2018, y que Morena ha buscado capitalizar ahora en sus campañas.

“Esta caricatura, en el contexto en el que se insertó (previo a la jornada electoral de 2022) pudo transmitir e implantar la idea, de forma encubierta o subliminal, de que Andrés Manuel López Obrador, hoy presidente de la República, apoyó a Morena y a sus candidaturas”, concluyó.

Tras una apelación del partido del presidente, el caso fue turnado a la Sala Superior y el pasado lunes 16 de enero, los magistrados validaron el fallo y determinaron prohibir a Morena el uso de los “Amlitos”.

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Para López Obrador, el fallo del tribunal para prohibir el uso de su imagen en muñecos o caricatura durante las campañas electorales, es un exceso.