Morelia, Michoacán

Las heridas generadas por el desplazamiento forzado llevan a Rá a buscar tierras heredadas por su abuela en el Bajo Cauca en Colombia. Entre lo onírico y lo real, Los reyes del mundo, de Laura Mora, se presentó en la vigésima edición del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM).

Los reyes del mundo cuenta la historia de Rá y sus amigos Culebro, Sere, Winny y Nano, cinco adolescentes que acuden a buscar un terreno heredado por su abuela, quien fue desplazada por la violencia que se vivía en Colombia años atrás y tras un litigio de tierras, salió un título a nombre del adolescente, quien viaja en bicicleta y aventón para llegar al terreno.

En Mesa Redonda para analizar la película, Laura Mora compartió que fue concebida para ejecutarse sin actores profesionales, lo cual le llevó a hacer un largo casting por todas las comunidades colombianas aledañas al Bajo Cauca, zona que vive en inestabilidad social y constantes oleadas de violencia.

“Hicimos un largo casting para conversar con quienes podrían interpretar a los personajes. No buscaba a los pillos o malandros, sino de los chicos que reflejaran en desamparo y abandono del Estado y la sociedad”, expresó.

Pese a que existía un guion previo, Laura Mora explicó que se brindó libertad plena a los actores para que desde el juego y la improvisación, trabajaran con sus emociones, creándoles un ambiente de confianza.

“Construimos con ellos un vínculo de confianza y los actores se entregaron desde el amor, asegurándonos de que ellos pudieran disponer de sus emociones para construir a los personajes”, añadió.

La directora colombiana explicó que el guion cinematográfico nació desde la aventura personal de viajar al Bajo Cauca, zona hostigada por constantes conflictos sociales.

La premisa fundamental fue que los jóvenes son los reyes del mundo.

Pese a que la zona del Bajo Cauca está dominada por la inseguridad, Laura Mora recalcó que se rodó la película durante ocho semanas sin problemas, toda vez que su equipo de grabación no se dejó dominar por el miedo.

“Mucha gente nos advirtió no rodar ahí, pero atravesamos el rumor y encontramos la belleza del lugar y sus lugareños. Siempre entramos con respeto por la gente y la oralidad. Cuando llegas así a una comunidad, el mundo se abre”, reflexionó.

Los reyes del mundo fue la película ganadora de la Concha de Oro por Mejor Película del Festival Internacional de Cine de San Sebastián, la exhibición llevada a cabo en el FICM representa la primera proyección en Latinoamérica, con excepción de Colombia.

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