Morelia, Michoacán
Un hombre acababa de jurar amor eterno a su prometida ante el altar y, tras ser declarados marido y mujer, lo ejecutaron a la salida del templo donde se realizó la boda.
Los hechos ocurrieron el pasado fin de semana en el municipio de Caborca, Sonora, donde el novio recibió cuatro balazos a manos de sicarios que lo atacaron afuera de la iglesia.
Según reportes de la prensa en Sonora, la víctima fue identificada como Marco Antonio, de 32 años de edad. Era originario de Durango, pero radicaba en Guadalajara.
Algunas imágenes que se viralizaron en redes sociales, muestran la trágica escena afuera del templo: la novia con su vestido blanco manchado de sangre, y a unos metros el cuerpo abatido a tiros de su esposo.
Junto al cadáver estaba una lujosa camioneta blanca con un enorme arreglo de flores en la carrocería, lista para trasladar a los novios al punto donde se llevaría a cabo la celebración posterior. En lugar de eso, llegó un vehículo del servicio forense.
Ante el crimen que sacudió a los sonorenses, el gobernador morenista Alfonso Durazo consideró que la situación ‘no es para caer en psicosis’ y conminó a la calma.
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