Morelia, Michoacán
Las luces se apagan y un sax suena, la cálida voz de una mujer inicia a entonar las notas de un tema y los bailarines recorren el escenario, a media luz. Es el ensayo de Mexicanísimo.
La producción que presentará el Teatro Mariano Matamoros del 14 al 17 de septiembre, con motivo de las fiestas patrias, retoma estampas del cine mexicano de la Época de Oro, el glamour, la música, el canto dolorido y vivificante, el monocromo y la nostalgia, desde una perspectiva que pretende ser una visita tras bambalinas de lo que fueran los Estudios Churubusco en las décadas de los 40 y 50, explica el director de Mexicanísimo, Santiago Cumplido.
Pero también lleva un pedacito del barrio, del recreo popular, la lucha libre, máscara contra cabellera, los gritos desde las gradas y las acrobacias en el ring.
Así, más que una historia, es una sucesión de pequeñas historias, aderezadas con la voz de Toña la Negra y la película Arráncame la Vida y las melodías de Agustín Lara, que luego se torna un viaje de inmersión en el México cotidiano, el que no sabe de la farándula, que anima a su gladiador favorito a moderador pasos de danza a sus contrincantes mientras come rosetas de maíz, cerveza y coca cola para los niños.
Santiago Cumplido refiere que son 16 artistas en escena, entre los que destaca la exniña cantora Evelyn Tortajada, con su peculiar voz, pero también un piano de cola y un ring de estética retro.
Por alrededor de una hora el espectador se sumerge en un México que ya no existe más que en el celuloide, un México que sentó las bases de lo que hoy vivimos y que a la luz de los años aparece inocente y trágico.
Al término de este viaje, aguarda al espectador una fiesta propia al ritmo de música de banda en vivo, sembrada con la comida que se sirve en las cantinas y regada con los destilados y espíritus que posicionan a nuestro país ante el mundo.
Tacos de lengua, tostadas de patita, tacos dorados, caldito de camarón, no es la sublime cocina nacional, sino la gastronomía que se crea y se recrea en las cantinas, en el cabaret, en la fonda y en el centro botanero, donde los mexicanos van lo mismo a celebrar que a llorar o a acompañar a otros en sus penas y alegrías.
Tequila, mezcal y cerveza, las bebidas que acompañan estas delicias y refrescan a quienes se disponen a disfrutar de un buen danzón.
El espectáculo es apto para mayores de 12 años, con una recepción a las 20:00 horas y arranque a las 21:00 horas, en tanto que los costos serán de 440 pesos en preventa y 550 pesos en taquillas los días de las funciones, con un precio estimado de la recepción posterior en 200 pesos.