Morelia, Michoacán – ESPN
El sueño de Matías Toledo para asistir al Gran Premio de México y apoyar al piloto mexicano Checo Pérez está cada vez más cerca. Su esfuerzo por reunir dinero para comprar un boleto hizo eco, al grado de que el propio piloto de Red Bull se enteró de su historia y le brindará su ayuda, pero con ciertas condiciones, pues el joven de 14 años debe cumplir con algunos requisitos.
La historia de Checo Pérez es conocida por la afición. A los 15 años se fue a Alemania en búsqueda de su sueño por llegar a ser piloto de Fórmula 1, vivió en la planta alta de una panadería y los días que no tenía competencia debía ayudar a elaborar el pan a primera hora de la mañana. Este mismo esfuerzo es el que busca ver en Matías Toledo, a quien le dejó unas tareas por cumplir para obtener el boleto (que Checo le regalará).
Las imágenes del Gran Premio de México 2021 y el podio de Checo Pérez encendieron la ilusión de Matías, quien le dijo a su familia que en 2022 estaría en el Autódromo Hermano Rodríguez, por lo que a inicios de año comenzó a vender frituras.
“Más que nada la idea fue de mi hermana, de poner los churros. Me dijo, ‘ya que quieres ver a Checo, pues pon temática de Checo Pérez’. No sé lo que piensa la gente, pero casi siempre se le queda viendo a Checo y me compran”, señaló en entrevista a ESPN Digital, Matías.
El apoyo de su familia en redes sociales se hizo viral y esto provocó que el propio Checo Pérez conociera la historia a través de su papá, quien se reunió con el pequeño aficionado originario de Morelia y fue así que le dejó ciertas tareas a cambio de su ayuda: Tener buenas calificaciones, seguir vendiendo, expandir su negocio y aprender inglés.
“Si quieres hacerlo gánatelo. Comenzó a trabajar con mi mamá, luego conmigo, y en vacaciones le dije que le faltaban tres meses y que apretara. Creo que estaría súper bien para que venda churros, que le platique a la gente la razón por la que trabaja y por eso le pusimos sus cartulinas, para que la gente supiera por lo que Matías trabajara”, explicó Montserrat, hermana mayor de Matías.
El principio el negocio de Matías contaba con churros y doritos, pero con la nueva tarea la variedad de productos se amplió a fritos, cacahuates, Red Bull y tacos de canasta.
“Ha venido más gente y pasan, ven y le dicen que es el niño del Facebook y lo apoyan bastante. Le dejaron unas tareas a Matías para que cumpliera su sueño. Matías debe seguir trabajando y no por hacerse viral era un hecho que tenía el boleto”, añadió su hermana.
La primera caja de Red Bull que vendieron fue una que el propio Checo Pérez les regaló junto a una gorra firmada. Ahora, Matías deberá cumplir con buenas calificaciones en la escuela, aprender inglés, pero también buscar la meta de reunir 13 mil pesos, cantidad que consideraron suficiente para adquirir un ticket para el próximo 30 de octubre.
“Me vería muy emocionado viendo los carros pasar, escuchar el rugir del motor. Lo comencé a ver desde Racing Point, en 2020 lo comencé a ver (cuando tenía 11 años)”, finalizó emocionado Matías.
