Transformando
Hoy en esta columna reconoceré como buena la intervención del presidente Andrés Manuel López Obrador en la reunión con los mandatarios Biden y Trudeau. Mas allá de las críticas que hemos escuchado enfocadas en su postura, sus zapatos y su imagen, hay que reconocer el mensaje con visión de altura que dio en dicha reunión.
Reconozco que había cierto escepticismo después del regaño que dio en la ONU apenas unos días antes. Sin embargo, el discurso en la pasada cumbre en Washington fue bueno desde el principio.
Hablo del T-MEC, impulsándolo para que exista una cadena de suministro con América latina.
También mencionó la integración de la economía de todo el continente para hacer frente en bloque a la amenaza China. Impulsar la inversión productiva para sustituir importaciones. Exigió ordenar el flujo migratorio y reconoció al presidente Biden su intención de regularizar a 11 millones de migrantes, que generan riqueza a los países.
Incluso, mencionó el trabajo en conjunto por combatir el cambio climático, con una velocidad y fluidez que no le habíamos visto en las mañaneras. Finalmente, un discurso digno y coherente, diría que el mas neoliberal que le he escuchado al presidente López Obrador.
La única diferencia es que este tipo de visión no se aplica en México, aquí no hay un trabajo en conjunto para fomentar las cadenas de suministro, no se impulsa la inversión productiva, ya que la incertidumbre de las políticas publicas y la inseguridad ya han hecho que existan declaraciones de empresas de detener su inversión, incluso de que algunos capitales ya han abandonado el país.
Es la primera vez que veo al presidente dar un giro tan pronto, ya que, si hubiera llegado a la cumbre, con la misma retórica que en la ONU, seguramente estaríamos hablando de algo distinto y esperando las consecuencias.
Quizá sea ingenuo, pero espero que esta iluminación en Washington, alcance a terminar la oscuridad en Mexico.
¡Es tiempo de los ciudadanos!
@abeperez
Empresario, analista político, Expresidente Canacintra
