París, Francia
la Conferencia Episcopal de Francia anunció ayer lunes que se deshará de parte de sus bienes, y que si es necesario, pedirá un crédito para indemnizar a las víctimas de los abusadores de niños en su seno.
Los obispos franceses no precisaron la cuantía total que estiman necesaria, pero aseguraron que esa cifra será financiada con sus propios fondos y no con donaciones de los fieles que se dedican ya a otras misiones.
El presidente de la Conferencia Episcopal, Éric de Moulins-Beaufort, indicó en conferencia de prensa que las diócesis harán un inventario para saber qué bienes hay disponibles y añadió que usarán además sus “reservas”.
El compromiso fue acordado en su asamblea plenaria, iniciada el martes en Lourdes, y que centró su agenda en las víctimas de pederastia, después de que una comisión independiente cifrara en octubre de este año en más de 216 mil casos desde 1950.
Los obispos también decidieron la creación de 9 grupos de trabajo, dedicados, entre otros, a analizar las causas de la violencia sexual en el seno de la Iglesia, y pidieron al papa el envío de un equipo que les ayude a abordar la protección de los menores.
La Conferencia, además, decidió la creación de un tribunal canónico nacional que entrará en funciones en abril de 2022 y la firma de un protocolo de actuación con las fiscalías locales.
“Se ha cometido mucho daño y debe ser asumido para liberar a los que lo han sufrido y a nuestra Iglesia”, añadió De Moulins-Beaufort.