Ciudad de México
El presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que la forma en que se realizó la boda entre el titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), Santiago Nieto, y la consejera del INE, Carla Humphrey, es un asunto escandaloso.
“Es un asunto escandaloso, en efecto (…) el servidor público tiene que evitar ese tipo de situaciones”, declaró en su conferencia de prensa esta mañana.
El mandatario dijo que por eso él no acude a eventos sociales.
“Fui invitado (a la boda), pero yo no puedo porque tengo muchas ocupaciones y además no acostumbro a hacerlo. Me invitan, les agradezco mucho pero no asisto, ni a comer a un restaurante”.
La boda, realizada en Guatemala para 300 invitados y bajo características contrarias a la austeridad que promueve la 4T, estuvo enmarcada por el escándalo donde Paola Félix, secretaria de Turismo de la CDMX, fue retenida durante seis horas al llegar al aeropuerto en un jet privado y presuntamente no declarar 35 mil dólares que portaba en efectivo.
Tras darse a conocer el incidente, la funcionaria capitalina presentó su renuncia a la Jefa de Gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum.
“Hay que recomendarles a los servidores públicos que actúen con moderación, con austeridad y que sigan el ejemplo de (Benito) Juárez, que decía que el servidor público debía aprender a vivir en la justa medianía”, dijo hoy López Obrador.
