Fotos: ACG

Morelia, Michoacán

Los claxons, mentadas de madre y también algunos gestos de aprobación, fueron la constante durante la jornada de lucha de la Sección XVIII de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) que se realizó en tres puntos de la ciudad.

Aunque el llamado a lo que denominaron como “concentración masiva” era a partir desde las 8 de la mañana, los trabajadores estatales adheridos al bloque de Gamaliel Guzmán arribaron a las salidas Quiroga, Pátzcuaro y Charo pasada las 10:00 horas.

“Mejor exijan educación”, les gritó un chofer de la ruta Villas del Pedregal, al percatarse de que el carril central de salida Quiroga estaba siendo bloqueado por alrededor de 100 docentes.

A la expresión de rabia del transportista, se sumaron otros automovilistas, quienes en señal de desaprobación, accionaban sus claxons; pero pese a la insistencia, los maestros ignoraban olímpicamente a los iracundos ciudadanos.

De manera simultánea, en salida a Charo se vivía una situación similar, donde los rostros de las personas detrás del volante lo decían todo: desesperación, enojo y amargura por la espera a la que estaban siendo condenados.

Fue en la salida a Pátzcuaro donde el bloqueo se hizo más extenso, pues con camiones de carga estratégicamente atravesados, los integrantes de la CNTE consiguieron que el tráfico se detuviera.

“Todos tenemos un familiar maestro”, argumentaba un docente frente a la cámara para pedir a la ciudadanía empatía y solidaridad; sin embargo, el llamado poco eco tenía, pues mientras los autos particulares se saltaban el camellón, accionaban su claxon a manera de mentada y despedida.

Los operadores de autobuses fueron uno de los sectores que más sufrieron, pues ante la eventualidad, anunciaban en vano las rutas hacia Villa Madero y Tacámbaro, por lo que se resignaron a pedir a la prensa “que ya quitaran a los manifestantes”.

Incluso, aquellos que acostumbran a pedir raite por la carretera, se vieron obligados a arrastrar la maleta por una carretera que no daba señales de ser reactivada a la brevedad.

El sol no ofrecía tregua y tampoco los profesores. “Si es necesario, vamos a radicalizar las acciones”, han anunciado en medio del bloqueo, como advirtiendo que esta será una semana larga.

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