Morelia, Michoacán
“¿Si quieren vivir verdad?”, susurró una bella mujer con cicatrices en los ojos ante la fila de treintones que estaban formados para la aplicación de la vacuna contra covid en Morelia.
Las filas iban desde el Poliforum y llegaban a la avenida Quinceo, ubicada a un par de kilómetros de la sede de vacunación
El asunto es de paciencia, esperar y esperar.
Algunos llegaron con banquitos marca gobernador, los vendían a 50 pesos, otros se recargaban en las paredes o automóviles cercanos.
“Pinche virus, nos trae atolondrados”, expresó Eva Santillán, esa mujer de bellos iris cafés que me invitó a ocupar un lugar delante de ella, con la molestia de una sujeta que iba en la fila, que devoraba fielmente una Coca-Cola y una torta de milanesa.
Venta de lapiceros, sombrillas, aguas, tortas y pan dulce son parte del escenario de los esperanzados para protegerse contra el SARS-Cov-2.
La espera de 5 horas.
Avenida Quinceo, justo en los comercios de venta de plásticos y compra de más banquitos.
La fila avanza rápido.
La espera de no más de tres minutos para seguir caminando.
“Dicen que no puedes tomar durante tres días, otros dicen que por cinco, ya valió madre, no podremos ir a tomar el fin de semana”, murmuraban quienes se aplicarían la vacuna jueves.
Al llegar al Poliforum, sede de la aplicación, un gurú espiritual predicaba la palabra de Dios mientras cuidaba que la gente siguiera la fila.
“Tú. ¡No te salgas de la fila! ¿No entiendes Español?, ésta es la cultura de los mexicanos, ándale, rápido”, expresaba el sujeto quien prosiguió con promesas de que habrá un juicio final que se llevará las almas de los que no adecúen su comportamiento a las normas preconcebidas del Evangelio.
Filas y más filas y se llega a la sala de aplicación.
“Lo que más preguntan es cuánto tiempo no se puede tomar, y son tres días. Si llegaran a sentir fiebre se dan un baño de agua fría y se toman un paracetamol de 500 miligramos”, insistían los auxiliares en de la Brigada Correcaminos.
Llenado de papeletas.
Fecha, marca y lote. Teléfono, correo, dirección y va el virus estabilizado para dentro del brazo izquierdo.
Cinco horas después, fuera del recinto, cara de preocupación en más de algunos, dicen que da fiebre de 40 grados. Ya veremos.
