Ciudad de México – El Universal
¿Sabías que las várices son un problema muy común en México? De hecho, según el Gobierno de México, en cuestión del género femenino ocurre entre los 30 y 40 años y se asocia, principalmente, al sobrepeso y el embarazo. En los hombres se puede presentar entre los 40 y 50 años y se atribuye a las cargas pesadas y al envejecimiento del cuerpo. También puede tener una causa genética y deberse a la vida sedentaria.
De ahí la importancia de entender que no es una condición que deba causarte pena o algún conflicto emocional, pues es algo totalmente natural y existen alternativas que te pueden ayudar.
Estas van desde tratamientos médicos, mejorar tus hábitos de ejercicio y alimentación, hasta remedios naturales contra las várices como el vinagre de manzana, que puede mejorar mucho el problema.
¿Qué son las várices?
Las venas varicosas son venas hinchadas y retorcidas que pueden verse justo debajo de la piel. Por lo general ocurren en las piernas, pero también se pueden formar en otras partes del cuerpo.
¿Cómo aliviarlas?
Hacer ejercicio, perder peso, elevar las piernas al descansar y no cruzarlas al sentarse puede ayudarte a evitar que las várices empeoren. El uso de ropa suelta y evitar largos períodos de pie también puede ser beneficioso.
Si las várices son dolorosas o no te gusta su apariencia, tu médico puede recomendar procedimientos para extirparlas. Recuerda que es totalmente necesario que sea el especialista el que te indique el tratamiento adecuado para ti.
Auxiliares naturales
Existen alternativas naturales contra las várices a las cuales puede recurrir, pero recuerda que estas son auxiliares, sin quieres erradicar el problema de raíz deberás ir al doctor.
Una buena opción para aliviar la inflamación y dolor de las várices es con el vinagre de manzana, ya que es un poderoso antiinflamatorio natural. El vinagre de manzana ayuda a mejorar la circulación y a que se reduzca el tamaño de las várices en las piernas.
Lo único que debes hacer es aplicar el vinagre de manzana en la zona afectada (de preferencia por las noches), dejarlo actuar media hora y enjuagar con agua. Verás que a la mañana siguiente notarás la mejoría.