Washington, EU
El presidente, Joe Biden, defendió este jueves su reforma migratoria, la más ambiciosa en la historia de ese país, por considerar que es urgente devolver la “justicia, la humanidad y el orden” al sistema de inmigración de Estados Unidos.
La propuesta de reforma migratoria, que Biden anunció en su primer día en el poder, llegó ayer jueves formalmente al Congreso, convertida en un proyecto denominado Ley de Ciudadanía Estadounidense de 2021, el cual será impulsado por el senador demócrata de origen cubano Bob Menéndez y la legisladora Linda Sánchez, de raíces mexicanas.
El presidente aseguró en declaraciones a la prensa:
“Esta propuesta es un primer paso importante para establecer políticas migratorias que unan a las familias, hagan crecer, mejoren la economía y garanticen la seguridad del país”.
El ambicioso plan prevé que en un término de ocho años 11 millones de indocumentados del país puedan lograr la ciudadanía, además, propone otorgar una residencia legal inmediata a los inmigrantes sin papeles que llegaron a esa nación siendo niños.
El presidente insistió en el proyecto de ley permitirá gestionar la frontera con México mediante inversiones inteligentes y hacer frente a la migración irregular que se genera en Centroamérica.
“Estas no son prioridades demócratas o republicanas, son prioridades estadounidenses y estoy deseoso de trabajar con los líderes en el Congreso para conseguir que se apruebe la ley”.
