Primera Plana – Morelia, Michoacán
Don José Guadalupe tiene 39 años viviendo en la calle Juana Barragán de la colonia Agustín Arriaga Rivera, y cuenta que le ha tocado vivir de todo: inundaciones, pestilencia y contaminación de las aguas negras, pérdida de muebles, lodazales, incluso dengue y para rematar, en los últimos años la inseguridad generalizada en toda la ciudad.
“Quien quiera cumplir un poco de todo lo que han prometido los que han venido en campaña aquí, que empiece por pavimentar esta calle.
“Han desfilado 13 o 14 administraciones municipales. Se aparecen cuando quieren el voto, prometen arreglos y bienestar para la colonia y nunca los vuelve a ver uno por aquí”, indica con disgusto don Guadalupe.
La situación que vive este ciudadano moreliano es la misma que padecen miles de familias de esta colonia localizada al poniente de la capital michoacana, la cual a pesar de ser una colonia inmersa en la mancha urbana, tiene rezagos de más de cuatro décadas.
Los primeros vecinos que llegaron ya completaron medio siglo de vivir en este asentamiento humano, y tienen claro que a lo largo de los años han sufrido del abandono institucional de las autoridades constitucionalmente responsables de atender sus necesidades.
Arreglando la calle con la suya
La maestra Xóchitl, otra vecina que, a partir de recursos propios y de sus vecinos, ha arreglado a lo largo de los años la calle Juana Barragán, cuenta que hace alrededor de 15 años se propusieron, con los medios a su alcance, pavimentar con asfalto esta calle, en el tramo que entronca a la avenida Periodismo, y lo lograron.
Sin embargo, después de que la administración de Wilfrido Lázaro pavimentó la citada avenida, dispuso que la calle Juana Barragán fuera su vía alterna durante las obras, sin consultar a los vecinos, ante lo cual quedó otra vez completamente destruida, por el intenso tráfico que tuvo y ni las gracias les dieron por utilizar lo que ellos con tanto esfuerzo lograron y arruinarlo, narra con desánimo la maestra.
“No queremos que ahora con esta obra (la del puente vehicular de Siervo de la Nación) vuelva a pasar lo mismo”, advierte.
Por ello los vecinos exigen al Gobierno de Morelia que, de una vez por todas, pavimenten esa calle, ya que es un derecho humano, recuerda Xóchitl, que las autoridades otorguen servicios de calidad a las comunidades, “y aquí simplemente nos han olvidado”, remarcó.
Ayuntamiento da un paso hacia la población
A pesar de todo hoy en la Arriaga Rivera se respira un ánimo diferente, pues existe la esperanza de que ahora sí puedan hacerles caso, después de que este domingo los acompañó en un recorrido el secretario de Urbanismo y Obra Pública del Ayuntamiento de Morelia, Mario Rodríguez Loeza, quien públicamente y ante Primera Plana se comprometió a resolver la problemática de la calle Juana Barragán, además de a realizar una planeación integral para resolver los diversos y graves problemas que aquejan a los vecinos de la zona.
Entre estos compromisos, la administración de Raúl Morón Orozco se comprometió a:
- Solucionar los graves de problemas de inundación que enfrentan año con año.
- Limpiar por completo el abandonado cárcamo del dren Arrollo de Tierras, taponeado desde hace dos temporadas de lluvias, el cual provocó la grave inundación que hace cuatro meses reportó Primera Plana.
- Limpiar y sanear las márgenes del dren, ya que su suciedad permanente ha provocado decenas de casos de dengue.
- Revisar las condiciones de todo el dren, para buscar una solución definitiva y adecuada a los problemas de inundación.
- Tomar en consideración las opiniones y comentarios de los vecinos en torno a la construcción del paso superior vehicular sobre Siervo de la Nación, especialmente en el tema de los drenajes y de la ciclovía que se quiere construir ahí.
- Pavimentar definitivamente la calle Juana de Barragán, para lo cual los vecinos solicitan que se haga con concreto hidráulico.
Respecto de la ciclovía en el nuevo puente vehicular, es preciso acotar que, por la poca distancia de desplante del puente, la rampa de subida quedaría demasiado inclinada, lo que no permitiría su tránsito en bicicleta. Por esta y otras razones los vecinos piden al Ayuntamiento que revise la propuesta, y si no es viable que mejor que no la incluyan, ya que los carriles vehiculares contemplados son de por sí muy estrechos.