Morelia, Michoacán
Durante los pasados días 31 de octubre, uno y dos de noviembre, hubo 19 municipios que no respetaron las medidas sanitarias contra el COVID-19, lo que puede representar un gran riesgo de repunte en la positividad de casos.
En Morelia, durante la noche del primero de noviembre y la madrugada del día dos, hubo una verbena popular en el Centro Histórico, con una afluencia incontable de personas, en espacios donde no hubo filtros sanitarios.
Mientras que, en Tanhuato, el panteón permaneció abierto con gran afluencia de personas con un filtro sanitario sin control; además de que en la plaza pública se registró una alta movilidad sin medidas de protección e incluso, se permitió la entrada de grupos musicales y bocinas.
En Tarímbaro, la autoridad local permitió la apertura de los panteones de la cabecera municipal y sus tenencias, en algunos hubo filtros sanitarios que se vieron rebasados por la afluencia, al igual que en los panteones municipales de Zináparo, Penjamillo, Yurécuaro, Álvaro Obregón, Nuevo Urecho, Charapan, Tepalcatepec, Buenavista, Churumuco, Parácuaro –y Antúnez—, Nahuatzen –y el de Arantepacua— en donde el ingreso fue prácticamente libre.
En los cementerios de las comunidades de Aguililla y El Aguaje, en el municipio de Aguililla; Angahuan y Cutzato, del municipio de Uruapan y San Antonio Tierras Blancas, municipio de Los Reyes, el acceso fue abierto, en algunos casos sin filtro sanitario o con aplicación insuficiente o rebasada.
Aunque los panteones de Gabriel Zamora y Tingambato permanecieron cerrados en las últimas 72 horas, días previos se permitió el acceso de una gran afluencia sin ningún control sanitario y cero aplicación de medidas preventivas.
La población que estuvo en situación de riesgo debe acudir a su unidad de salud más cercana en caso de presentar fiebre, dificultad respiratoria, tos o dolor de cabeza.
