Ciudad de México – El Universal
Si estás comiendo atún enlatado en este momento, quizás quieras dejarlo de lado antes de leer esto. La FES Cuautitlán lleva un tiempo tomando muestras de distintos alimentos en México con el fin de revelar fraudes alimentarios. Ahora, utilizando la técnica de Reacción en Cadena de la Polimerasa, un grupo de académicos encabezados por el doctor José Francisco Montiel, encontraron presencia de carne de delfín en tres de las 15 muestras estudiadas.
“Este hallazgo evidencia un grave fraude alimentario”, se lee en el comunicado de la FES Cuautitlán, toda vez que el delfín no es un componente declarado en el etiquetado. El colmo es que el delfin es una especie “sujeta a protección especial”, lo que significa que deben tomarse acciones para propiciar su recuperación y conservación.
El delfín no es dañino para el ser humano
Es un hecho que el delfín no es dañino para el ser humano, pero que el consumidor no conozca a detalle el origen de sus alimentos es un “fraude” dice el doctor Montiel. Se trata de una práctica común en la que los productores agregan elementos que le sirven para “abaratar costos” explica el académico.
Pero otra de las razones podría estar en la logística de pesca. El delfín podría ser un daño colateral al momento de pescar atún, pues antes la Organización Mundial de Comercio ha señalado que los bancos de atún en la zona tropical del Océano Pacífico se desplazan por debajo de grupos de delfines. Como resultado, algunos delfines quedan atrapados en las redes de pescadores, en un mecanismo que por desgracia resulta familiar al caso de la totoaba y la vaquita marina.
Recientemente el atún enlatado fue objeto de otra polémica, cuando la Procuraduría Federal del Consumidor encontró que 18 de 57 presentaciones vendidas en México contenían, sin informarlo, soya. En aquel entonces se reportó que el atún aleta amarilla de Aurrera tenía hasta un 62% de soya.
El doctor Montiel ha estado a cargo de análisis de otros productos, como café, carne de hamburguesas, bacalao noruego, soya, maíz, granola y manzana.