Foto: José G. Rodríguez

Morelia, Michoacán – José G. Rodríguez

Adán Ruíz y Francisco Herrera son dos talentosos jóvenes michoacanos, el primero es capitalino y el segundo es del municipio de Tanhuato, actualmente residen en la Ciudad de México donde estudian cine. Hoy regresan a la tierra que los vio nacer para presentar Susurros del Lago, película en competencia en el Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM).

Adán presenta su segundo proyecto como director después de La mariachi, corto documental con el que ganó el premio a Mejor Cortometraje Latinoamericano en el Festival de Cine de Honduras y recibió una mención honorífica en el Programa de Diversidad Sexual, hoy Cuorum Morelia, presentado de forma paralela en el FICM.

Primera Plana platicó con estos cineastas emergentes que nos hablaron de Susurros del Lago y de sus próximos proyectos:

Después de que ambos trabajaran en ‘La mariachi’, ¿de dónde surge la idea de este nuevo proyecto?

Adán: Es un proyecto que se venía desarrollando hace 4 o 5 años, pero fue apenas hasta el año pasado que pudimos filmarlo. Respecto a La Mariachi, tenía una estructura aristotélica con una narrativa muy convencional, por lo que yo estaba interesado en explorar otras posibilidades, tanto de la forma como del lenguaje y la estética, por eso fue que decidimos hacer esta película (Susurros del Lago) híbrida, que opera como entre lo documental y la ficción.

Francisco: Fue un proceso que se fue gestando poco a poco, tuvimos un primer acercamiento en 2014, en Día de Muertos y yo creo que de ahí parte mucho de lo que vimos esa vez, pues me quedó muy claro lo que vimos esa vez; como el amanecer y el potencial que tenía el Lago y Janitzio.

¿Por qué abordaron la cultura Purépecha?

Adán: Yo siempre he estado interesado en la cultura Purépecha porque me parece que sabemos mucho sobre los Mayas, sobre los Mexicas, y sobre otras comunidades originarias; sin embargo, en relación al pueblo Purépecha no sabemos prácticamente nada previo a la Conquista, eso por una parte y por otra, el lenguaje que hablan no tiene parentesco lingüístico con otras lenguas que se hablan en México, entonces todo esto me parece que le otorgan un toque muy místico.

Una característica que destaca en la película es la fotografía, ¿Cómo valoras tu trabajo visto en pantalla grande?

Francisco: Yo me siento bien con mi trabajo, lo veo como un buen ejercicio, como una buena exploración, me quedo con cosas buenas y también detecto cosas que debo mejorar en cuanto a la técnica y la forma, tal vez, pero creo que tanto Adán como yo estamos avanzando y pues ahora hay que probarnos con nuevos retos.

No debe ser fácil grabar en el Lago de Pátzcuaro sin tener dificultades ¿fue así, y cómo las afrontaste?

Francisco: Sí hubo dificultades, pero logré resolverlas en locación; ahora sí que se hace lo que se puede con lo que se tiene, pues llevábamos lo necesario a la isla, solo lo indispensable; la cámara, tres lentes, filtros ND y una luz, por cualquier cosa. Entonces ahí fue realmente trabajo de campo, estar en la acción y pues más que sentir como reto, fue un desahogo del paisaje urbano. Yo tenía cierta melancolía o nostalgia por el paisaje rural y pensé en que tenía que dar lo mejor, pues no sabía cuándo iba a volver a fotografiar un documental, y pues fue aprovechar el momento. Pensé en que tenía que dar lo mejor de mí, porque no sabía cuándo iba a volver a fotografiar un documental.

¿En qué nuevos proyectos están trabajando?

Adán: Mi próximo proyecto será totalmente una película híbrida que tiene que ver con la espiritualidad en las montañas. Trata sobre un grupo de alpinistas que pretenden ascender a un volcán activo.

Francisco: Ahora en verano fui a Tapachula y a Tijuana y fotografíe otro documental de migración que está en postproducción. También estoy trabajando en la historia de un boxeador, la cuál voy a dirigir y la que Adán produce. Es sobre un boxeador que empezó con peleas clandestinas en Tepito, conoce el mundo del box, domina la disciplina, gana un campeonato del caribe, muchas personas cuentan que pudo ser campeón del mundo pero cayó en las drogas.

Como última pregunta, ¿Qué les recomiendan a los más jóvenes que quieren hacer cine?

Adán: Creo que es responsabilidad de todos los que creamos contenido a no contribuir a esta contaminación de imágenes, en caso del cine, entender el cine como un lenguaje, como una forma y leer bastante y no solo estar haciendo por hacer, pero sí me parece fantástico que exista esta democratización de los medios de producción para que cualquiera pueda hacer cine.

Francisco: Que hagan cine como puedan pero háganlo. Yo pienso que cualquiera puede hacer cine, pero hay que darle su espacio y su tiempo a las historias y no desistir; si es un proceso lento pero te da buenos resultados y satisfacción.

Foto: José G. Rodríguez

SINOPSIS

Un pescador p’urhépecha medita sobre sus últimos días. En el lago que rodea su hogar, distintos tiempos coexisten, la luna eleva la marea y con su luz revela secretos que no son visibles durante el día. Poco tiempo resta antes de que el pescador quede atrapado para siempre en las aguas místicas donde susurran todas las voces.

La película se ha exhibido ya en festivales como DocsMX, Oaxaca Film Fest, DoqumentaMX o Black Canvas. Adán Ruiz, director de la cinta, estará presente en la proyección de este lunes 21 en la Sala 2 de Cinépolis Morelia Centro. Habrá una sesión de preguntas y respuestas al finalizar.

Susurros del Lago tendrá funciones el Lunes 21, a las 19:00 horas; el martes a las 17:00 horas; el miércoles a las 17:30 horas y el jueves a las 20:30 horas, en el marco del FICM.

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