Morelia, Michoacán – Melissa García
Con el propósito de romper el esquema de que las limitaciones son parte de la discapacidad, la “Rodada sin límites” que salió de la Ciudad de México a principios de septiembre y a recorrido 11 estados de la República, llegó esta tarde a la capital michoacana con un contingente de 20 personas, 13 de ellas con discapacidad motriz.
Dicho contingente aumentó gracias al acompañamiento de otros motociclistas, quienes se unieron en carretera para rodar a su lado desde Capula hasta el Centro Histórico de la capital michoacana.
En entrevista con medios, Cristian Estrada, organizador de la rodada en Michoacán, explicó que la “Rodada sin límites” se trata de un programa de las fundaciones México Incluye y Red Nacional para Prevenir la Discapacidad (Renapred), con el que se pretende romper con las limitaciones, esas que “podemos tener todos”.
“No solamente es un evento, queremos romper las barreras de la discapacidad a través de la educación”, afirmó
En este caso, precisó Alan Estrada, promotor de la rodada a través de la marca Itálika, es el tercer reto de México Incluye, el primero se realizó en el Kilimanjaro, la montaña más alta del Continente Africano, el segundo fue bucear en las aguas del pacífico mexicano, tocando este año la rodada para demostrar que no es la condición de una persona lo que determina qué puede o no hacer, sino el esfuerzo y voluntad que hace que no haya imposibles.
Así mismo, los organizadores comentaron que realizarán una visita el día de mañana 25 de septiembre a partir de las 11 de la mañana, en las instalaciones del CRIT en Michoacán, ubicadas al norte de Morelia, donde convivirán con los niños que ahí son atendidos.
Finalmente, precisaron que las motocicletas que utilizan para el recorrido fueron modificadas directamente desde la planta de producción de la marca Itálika, principal patrocinador, luego de hacer un estudio de aquellos que participarían, para precisar la necesidad de la modificación.
Parte de esos corredores, comentaron, tienen alguna amputación, ceguera, espada bífida, parálisis cerebral, entre otros, sin embargo, ninguna de esas discapacidades limita que la sociedad sea más empática e inclusiva con estas personas.
