Ciudad de México – Milenio
Hace unos meses, científicos de la NASA descubrieron el asteroide 2006 QV89, que se aproxima a la Tierra a una velocidad de 44 mil kilómetros por hora y que, según informaron, existía la posibilidad de que impactara contra el planeta los primeros días de septiembre.
Los científicos observan su trayectoria y analizan las probabilidades de que se estrelle con la Tierra, pues se tiene previsto que sea el 9 de septiembre durante la madrugada cuando el asteroide se acerque a una distancia relativamente riesgosa.
El asteroide posee un diámetro de 40 metros, que aunque no suene muy amenzante, de acuerdo con los especialistas, la velocidad a la que se aproxima podría causar un daño similar al que ocasionó el meteorito que cayó en Tunguska, Siberia, en 1908, que destruyó un territorio de 2 mil kilómetros cuadrados.
Sin embargo, y aunque investigaciones previas, de la Agencia Espacial Italiana aseguraran meses atrás que las probabilidades de impacto fueran de 1 entre 11 mil 428, la NASA confirmó ya que 2006 QV89 no representa un peligro.
Además, el Centro de Estudios de Objetos Cercanos a la Tierra
de la NASA informó que “todos los escenarios de impacto para el próximo siglo fueron eliminados”.
Así que, al menos los meteoritos nos dejarán dormir tranquilos la madruagada del 9 de septiembre durante los próximos 100 años.