Ciudad de México – Milenio
Un adolescente de 14 años que sufría bullying se suicidó frente a la mirada de varios de sus compañeros, al oeste de Londres, en Reino Unido.
De acuerdo con el Daily Mail, Sam Connor salió de la escuela católica de Chertsey junto a unos 50 compañeros y mientras esperaban el tren, Sam se acostó en las vías mientras la locomotora pasaba encima de él, frente a la mirada atónita de sus amigos.
Uno de los niños declaró que cuando el tren entró a la estación, Sam dio su mochila a un amigo y se acostó en las vías antes de que el tren pudiera frenar. “Nadie imaginó lo que iba a suceder”, dijo uno de los testigos.
“Sam estaba siendo acosado en la escuela, pero no sé cómo, pero muchos niños son acosados y no tienen la fuerza para decirlo o buscar ayuda. Sólo quedaban cuatro días de clase. Pudo haber aguantado un poco más”, declaró uno de los mejores amigos de Sam.
Horas después de lo sucedido, las autoridades encontraron una nota suicida entre las pertenencias de Sam, en la que escribió dos nombre y la contraseña de su celular.
A pesar de los múltiples informes de intimidación, la Escuela Salesiana en la que iba Connor comunicó que no tenían conocimiento de que Sam sufría de acoso escolar.
El director de la escuela, James Kibble, se dijo devastado por la situación y que organizará una serie de asambleas para ayudar a los estudiantes a aceptar la tragedia.
La madre de un compañero de Sam contó: “Mi hijo jugaba con él. No vio jamás que le pegaran pero sabía que Sam era víctima de bullying. Esto es horrible”.
Las autoridades esperan que el teléfono de Sam contenga pistas que los lleven a conclusiones concretas sobre los motivos de su muerte, pero a pesar de que la policía considera que fue algo deliberado, algunos afirman que fue un “accidente terrible” durante una “broma que salió mal”.