Morelia, Michoacán.- En el Día Mundial Contra la Trata de Personas, se pone de relieve que en promedio en la entidad se presentan dos denuncias al mes por este delito ante las autoridades estatales de justicia, en un agravio que no distingue origen étnico, sexo o edad.
Joel Cruz, fiscal especializado en feminicidios y trata de personas de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Michoacán (PGJE) argumentó que muchos de los casos de trata originalmente se registran bajo otros delitos, como secuestro, asesinato, sustracción o violación, y conforme al avance en sus carpetas de investigación es como se canalizan a su área y se vuelven a catalogar como trata.
Dimensionó que este crimen no distingue clase social, etnia, sexo, edad o creencias, pues entre las principales víctimas se tiene los grupos de jóvenes, niños, mujeres y personas de comunidades indígenas, que caen bajo promesas falsas de amor, trabajo, estudios o superación.
En ese sentido, el delegado de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) federal, Ricardo Díaz Ferreira, detalló que para evitar los problemas de trata de personas se deberá tomar en cuenta tres aspectos esenciales: detectar el modo de operación de las bandas para seducir a inocentes, el traslado de las personas y el lugar final a donde llevan a las víctimas para ser forzadas a trabajar.
Refirió que por medio de los perfiles que hay en internet, los integrantes de las bandas de tráfico de personas se encargan de enganchar o engañar a las personas con promesas falsas bajo perfiles apócrifos, en especial a jóvenes y niños que caen en su yugo.
Explicó que la coordinación entre dependencias municipales, estatales y federales es vital para localizar a una persona que ha caído en las redes de trata, en especial de aquellas instituciones que vigilan la seguridad pública y la migración para detectar aquellos casos que se presumen sean de tráfico de personas.
Finalmente, el titular de la CEAV argumentó que detectar las casas de seguridad o lugares donde las personas privadas de su libertad son puestas a trabajar forzadamente es vital para liberarlas y atrapar a los sospechosos.
Agregó que la denuncia oportuna y anónima, junto a la vigilancia interinstitucional, son claves para desarticular las bandas de trata de personas y conocer los modos de operación para prevenir a la ciudadanía, en especial los grupos vulnerables para que caigan en este delito, que es el tercero más usado por el crimen organizado después del tráfico de drogas y el de armas.