Barcelona, España.- El gol 600 como profesional en la carrera de Lionel Messi le dio el triunfo al Barcelona 1-0 sobre el Atlético de Madrid, con lo que el conjunto culé llegó a 69 puntos en la cima de la liga española, alejándose ocho del equipo colchonero que se quedó en 61 en el segundo lugar y que dejó escapar una gran oportunidad de apretar la disputa por el título.
Un precioso cobro de tiro libre hecho por la Pulga al minuto 26, fue la diferencia en un encuentro muy disputado y que se resolvió por la mínima. Messi cobró la falta, la pelota viajó por encima de la barrera que intentó tapar el esférico con un salto, sin embargo, el viaje de la redonda fue perfecto; superó el obstáculo, llegó hasta la portería defendida por Jan Oblak, y pese a su lanzamiento, el guardameta no pudo detener a la pelota que se clavó apenas abajo del ángulo superior derecho, informó Mediotiempo.
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El conjunto blaugrana fue amplio dominador durante la primera parte del encuentro, empujando al Atleti hacia su propio campo y teniendo las más claras de peligro, pero fue hasta que Messi tuvo el tiro libre que el partido se desequilibró a favor de los locales.
Si no quería que prácticamente se le escapara la liga, al Atleti no le quedaba de otra más que lanzarse al ataque, para al menos rescatar el empate. Por ello, en la parte complementaria los colchoneros tuvieron más la pelota y presionaron más al Barça en tres cuartos de cancha.
En el intento por al menos rescatar un punto, el Cholo mandó todo su arsenal al ataque para reforzar a Antoine Griezmann y a Diego Costa quienes tocaban poco el esférico. Sacó a Gabi y a Vrsalkjo para darle entrada a Kevin Gameiro y a Ángel Correa, pero aún así no le fue suficiente a los visitantes.
Ya en el último cuarto del encuentro, Luis Suárez había anotado el segundo para Barcelona, pero fue anulado por un apretado fuera de lugar, mientras que al 77’, Busquets conectó un balón dentro del área en un tiro de esquina, obligado al guardameta Oblak a emplearse a fondo para evitar el segundo.
Al Atleti todavía se le complicó aún más la situación porque Ernesto Valverde decidió cerrar el partido al 84’, al sacar a Coutinho del ataque, para reforzar su defensa con la entrada del brasileño Paulinho.