Nueva York, EU.- En el juego de “confianza”, un diplomático australianomurió al caer desde su balcón en Manhattan la madrugada del miércoles durante una noche de borracheras con amigos y su esposa.
Las autoridades le identificaron como Julian Simpson, de 30 años, quien era segundo secretario de la delegación australiana, de acuerdo con el New York Post.
El diario publicó que Simpson y su esposa salieron a cenar el martes con un grupo de amigos y que ingirieron alcohol, tras lo cual regresaron al apartamento de la pareja, informó Excélsior.
El grupo subió a una terraza en el tejado del edificio para ver el Empire State Building iluminado con los colores del arcoíris para celebrar la aprobación en Australia del matrimonio entre parejas del mismo sexo.
Empire State Building lights up to celebrate SSM vote https://t.co/LlUZj61pBk pic.twitter.com/NmpuYA3Tee
— Zesty New York News (@zesty_NY) November 15, 2017
Mientras estaban fuera, Simpson supuestamente hizo dar giros a una de las mujeres que estaban en el grupo, tras lo cual regresaron al apartamento.
El esposo de la mujer, que no ha sido identificado, le reclamó a Simpson, quien le aseguró que no tuvo mala intención, siempre según el rotativo neoyorquino, que cita a fuentes policiales.
Para demostrarle que podía confiar en él, Simpson le propuso que jugaran a “tenerse confianza”, diciéndole que se echaría hacia atrás de espaldas en el borde de la barandilla y confiaría en que él lo retuviera para no caer al vacío.
Voy a demostrar que puedes confiar en mí. Juguemos al juego de la confianza”, le dijo Simpson al hombre de 24 años momentos antes de que resbalara y cayera.
El amigo dijo a la policía que tendió su brazo para atrapar a Simpson, pero el diplomático borracho perdió el control y cayó sobre la cornisa alrededor de la 1:35 horas locales, según NY Daily News.
Fue declarado muerto en la escena, hecho que los policías están tratando como un trágico accidente.
La policía no sospecha que haya habido mala intención por parte del hombre con el que Simpson jugaba.
Los agentes reportaron que había un fuerte olor a alcohol entre los invitados, quienes admitieron que habían estado bebiendo.
News.com.au publicó que el primer ministro australiano, Malcolm Turnbull, le dijo a al canal Sunrise esta mañana:
Es una tragedia. Nuestros corazones están con su familia. No puedo proporcionar más detalles en esta etapa. Es una tragedia impactante: una vida joven perdida”.
