Morelia, Michoacán.- Los procesos, traumas y trabas para que las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) emitan el Comprobante Fiscal Digital por Internet (CDFI) del Servicio de Administración Tributaria (SAT) son absurdos, además de que se requiere de cerca de 80 mil pesos para adquirir el equipo de cómputo necesario para tales disposiciones, lo que es un abuso total, consideró Tulio Guerrero, vicepresidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de Morelia (Canaco-Servytur).
En conferencia de prensa, el representante empresarial opinó que las Mipymes están indefensas ante los sistemas de fiscalización que ha impuesto el SAT, cuya actualización debe ejecutarse antes del 1 de diciembre de 2017; es decir, pasar de la versión 3.2 a la 3.3 del CFDI.
A tres meses de que se cumpla con la disposición para que las empresas del país cuenten con un sistema de contabilidad cibernético, el empresario local se quejó de que los pequeños negocios no están listos para ello, lo cual resultará “un trauma” para los pequeños empresarios, toda vez que para cumplir con la disposiciones del SAT se debe adquirir equipos de cómputo de última tecnología, recursos que no están contemplados en las finanzas de pequeños negocios.
Además, Tulio Guerrero señaló que el CDFI requiere de una banda ancha de internet, cuya renta no puede ser cubierta por todos los contribuyentes.
“No podemos invertir en cosas de ese tipo cuando las ganancias que se tienen mensualmente ni llegan a ese tope”, aclaró.
Autoridades fiscales a nivel federal han señalado que después del 1 de diciembre todas aquellas facturas expedidas con la versión 3.2 no tendrán validez fiscal para deducciones y acumulación de ingresos, por lo cual empresas y Mipymes que no migren a la nueva versión, perderían clientes y mercado, además de que no podrán deducir impuestos y serán acreedores a sanciones por parte del SAT.
Por todo esto, Tulio Guerrero señala como “absurdas”, las disposiciones del SAT en torno al CDFI.