Ciudad Nezahualcóyotl, Estado de México.- “¡Zepeda! ¡Se empeda!”, gritaban en medio del aguacero mientras saltaban en el moshpit. Juan Zepeda, candidato del Partido de la Revolución Democrática (PRD) para la gubernatura del Estado de México, llegó al palacio municipal de Neza para cerrar su campaña con un concierto de rock y heavy metal.
Se subió al escenario y bailó al ritmo de su guitarra eléctrica, informó el sitio web Fusión en Español.
“El único candidato que apoya el rock”. Así es como muchas de las bandas promocionaron al político que es tercer lugar en las encuestas. Un miembro del equipo de campaña me dijo que organizaron el evento de último minuto y que los rockeros supuestamente se acercaron a Zepeda para ofrecerle su apoyo.
Táctica inovadora e íronia latente. El rock, históricamente una expresión anti-establishment, se usó para hacer política y atraer a un público usualmente valemadrista a sumarse a la plataforma del candidato de izquierda.
Pero para muchos Zepeda es the real deal. Antes de adentrarse en la polaca, solía ser parte de la escena local de rock en Neza. Incluso, cuando era joven, se juntaba con algunos miembros de las bandas que tocaron en el concierto del miércoles.
“Zepeda sí tiene mi voto. Neta sí vi un cambio positivo cuando el estuvo de presidente municipal”, me dijo Fernando Maravilla, un residente de Neza de 39 años que se autodescribe como un rockero de corazón.
“Este concierto no es para apoyar a ningún candidato, es una comunión de rock n’ roll gratuito para el pueblo”, subrayó Chucho Tex, vocalista de Tex Tex, cuando le pregunté sobre su ideología política.
¿La apuesta de Zepeda funcionó? La mayoría de los jóvenes que entrevisté en el evento se rieron cuando les pregunté si verdaderamente pensaban votar este domingo. Adrián Rosas Hernández, un estudiante de 20 años con una playera de la banda Leprosy, me dijo que sólo le interesaba el concierto. Su novia, Carolina Díaz, una joven con el cabello pintado de rojo, me dijo que tampoco planeaba votar.
Alex Villa, otro joven de 19 años que llegó al concierto con un grupo de amigos, me dijo que sólo estaba ahí para chupar y ver a Transmetal y Tex Tex.
Los candidatos a la gobernatura del Estado de México se han esforzado como nunca antes para conectar con los jóvenes. Activar el voto millennial es clave en una elección sumamente cerrada.
La campaña del priista Alfredo del Mazo recientemente convirtió al candidato en un héroe de anime que lucha a lado de Dragon Ball Z y Naruto para ganarse el voto de los geeks. También hay cómics circulando que promueven a la candidata del Partido Acción Nacional (PAN) y se burlan de Delfina Gómez, candidata del Movimiento Regeneración Nacional (MORENA). Antes de lanzar un concierto, Zepeda ya se estaba haciendo el cool respondiendo preguntas en Facebook sobre los Avengers.
Sin embargo, es probable que estos políticos chavorucos solo la estén forzando en grande.
La participación de los jóvenes mexicanos en la vida política sigue siendo muy baja. Además, los candidatos en Estado de México han sido todo menos inspiradores. No quiere decir que esta no sea una elección histórica. Delfina Gómez y Alfredo del Mazo están técnicamente empatados en las encuestas. Si MORENA logra sacar al PRI de su bastión, el partido del Presidente Enrique Peña Nieto perdería la mayoría de sus recursos para operar otras elecciones y promover su agenda política.
La elección también es vista como un preludio para la presidencial en 2018.
El anime, los cómics y los conciertos acaban. Ahora empieza la compra de votos, la intimidación, los acuerdos tras bambalinas, etc. El dinosaurio no se irá sin dar la pelea de su vida.
Durante el concierto del miércoles, Zepeda me aseguró que es “el único candidato sin un caso de corrupción”. Además prometió traer a Iron Maiden y Metallica al Estado de México si lo eligen gobernador.