Juan Antonio Magallán
Morelia, Michoacán.- Después de dos horas de “calvario”, el Viacrucis Viviente de la parroquia “El Salvador del Mundo” ha concluido. El recorrido transcurrió sin incidente alguno a lo largo de casi tres kilómetros que abarcó.
Al dar las tres de la tarde en punto, Alfredo Hernández fue “crucificado”. El hombre, de oficio impresor y repartidor de periódicos, dio vida al Nazareno en la 47 edición de la cerebración parroquial.
Con el rostro inundado de tristeza, los feligreses fueron testigos del sufrimiento que vivió Jesús de Nazareth. Ni el sofocante calor impidió que fieles y espectadores comunes acompañaran a Jesús en su dolor.
La afluencia fue menor a la esperada, ya que en años anteriores los espectadores superaban los dos mil, ahora se observaron alrededor de 500.
La grey se mostró su fe con la representación viviente de la Pasión de Jesús: el luicio, aprehensión, crucifixión y muerte, aunque este año la dramatización logró reunir sólo a un medio centenar de personas.
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