Washington DC, EU.- John Kelly, secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, confirmó este lunes un reporte de la agencia de noticias Reuters donde se consideraba separar a las madres que cruzaran la frontera ilegalmente, esto con el fin de disuadirlas de emigrar.
Kelly fue consultado en una entrevista en CNN sobre la propuesta, informada por Reuters el viernes, en la que el Departamento de Seguridad Nacional cambiaría la actual política del país y que mantendría a los padres en custodia, mientras que los niños quedarían a cargo del Departamento de Salud y Servicios Humanos, informó la agencia de noticias Reuters.
“Sí, lo estoy considerando, para impedir más movimientos en esta red terriblemente peligrosa, estoy considerando eso exactamente”, afirmó Kelly.
“Tenemos una tremenda experiencia en el trato con los menores no acompañados”, afirmó. “Serán bien cuidados mientras lidiamos con sus padres”, remarcó.
El cambio en la política permitiría al Gobierno mantener a los padres en custodia mientras enfrentan la deportación o esperan por audiencias de asilo.
Los niños serían puestos “bajo el método menos restrictivo posible” hasta que puedan ser cuidados por un familiar estadounidense o un tutor designado por el Estado, habían asegurado funcionarios que dijeron haber sido informados sobre el plan del Gobierno del presidente Donald Trump de adoptar esta medida.
Actualmente, las familias que tratan de evitar la deportación o piden asilo en general son liberados con rapidez y se les permite quedarse en Estados Unidos hasta que sus casos son resueltos. Una decisión de una corte de apelaciones federal impide una detención prolongada en el caso de los menores.
“Déjeme comenzar diciendo que haría casi cualquier cosa para disuadir a las personas de América Central para que se ingresen a esta red muy, muy peligrosa que los trae a través de México a Estados Unidos”, afirmó Kelly.
Agregó que organizaciones de servicio social le han dicho que más del 90 por ciento de las mujeres que hacen el viaje desde América Central son abusadas sexualmente.
Henry Cuellar, representante demócrata de Texas, cuyo distrito incluye alrededor de 320 kilómetros de la frontera con México, criticó la propuesta del Departamento de Seguridad Nacional. “En conclusión: separar a las madres de los hijos está mal”, aseguró en un comunicado el viernes.
“Ese tipo de cosas es donde nos alejamos de la seguridad fronteriza y pasamos a la violación de los derechos humanos”, agregó Cuellar.
Unos 54.000 niños y sus guardianes fueron detenidos entre el 1 de octubre de 2016 y el 31 de enero, cifra que más que duplica a los capturados en el mismo periodo previo. (Reporte de Eric Beech; Editado en español por Javier Leira y Manuel Farías).