Chilpancingo, Guerrero.- Para el mes de marzo podría registrarse un despido masivo de sus trabajadores, debido a las complicaciones económicas que genera el incremento a los combustibles, señaló la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
Adrián Alarcón Ríos, presidente de la Coparmex en la región Centro de Guerrero, sostuvo que fue la delegación de Guerrero la que se puso al frente de la postura de no firmar el acuerdo nacional propuesto por el gobierno de la República.
Indicó que la crisis económica nacional apenas comienza, ya que tanto empresarios como consumidores aún cuentan con algunos recursos ahorrados durante diciembre de 2016.
Sin embargo, destacó que se espera que para el mes de marzo comience a registrarse el despido de trabajadores, lo que puede traducirse en complicaciones en temas como el de la inseguridad pública.
“Si el recurso circulante es poco entonces no hay ventas, sin ventas no se tienen ingresos en los negocios y al no contarse con ello lo que viene son recortes en las nóminas”, apuntó el dirigente empresarial.
Admitió que en aras de resistir, los integrantes de Coparmex podrían recurrir a la contratación de préstamos bancarios, pero no tendrían la certeza de cómo se pagarán.
Sostuvo que el gobierno federal no asume una postura sensible, razón por la que se puede generar el surgimiento de grupos radicales que pongan en riesgo la estabilidad social.
Para evitar que la situación se salga de control, dijo que la Coparmex demanda que 50 por ciento del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) se reduzca por lo menos 50 por ciento.
Recordó que hasta hace poco, la Coparmex era un aliado “casi” incondicional del gobierno de la República, pero dadas las circunstancias, la postura actual ha dado un viraje importante.
Con información de Milenio.