Redacción
Morelia, Michoacán.- El dirigente estatal de la Comisión Reguladora de Transporte (CRT), José Trinidad Martínez Pasalagua, reiteró que el ajuste tarifario a ocho pesos que se aprobó la Comisión Coordinadora del Transporte Público de Michoacán (Cocotra) queda totalmente rebasado, lo que para él lleva la tensión de la sociedad frente al gobierno al límite.
“Igual que cualquier ciudadano, gremio o sector, los transportistas también están tocando los límites de la prudencia; llegaron al hartazgo ante los embates inflacionarios y un ajuste tarifario insuficiente que ha sido rebasado. El gasolinazo rebasa todo”, protestó Martínez Pasalagua.
Señaló que la estrategia federal de un 20 por ciento de incremento a las gasolinas significa un “tiro de gracia” del Gobierno Federal contra los transportistas, y que las justificaciones al gasolinazo por parte de la SCHP y el exlíder nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Manlio Fabio Beltrones, de ningún modo resultan satisfactorias.
Anunció que la CRT fija su posición en exigir al Gobierno de la República desista del incremento al combustible, puesto que consideran que es una “burla” para los mexicanos que se pretenda que con un mínimo incremento del salario mínimo puedan cubrir el gasto de la canasta básica y el transporte. Una burla que el dirigente transportista reclama personalmente al exlíder nacional del PRI.
Precisó que los transportistas vienen arrastrando los efectos de la pérdida del poder adquisitivo y sin un ajuste tarifario desde hace tres años y medio, y aun en esas circunstancias la CRT ha buscado mantener la calidad del servicio a través de unidades en buen estado.
Puso de relieve que el sector transportista cuenta con una fuerza de trabajo significativa, detallando que en el estado existen más de 40 mil concesionarios con alrededor de 80 mil chóferes, lo que implica más de 80 mil familias de 4 a 5 miembros, dando como resultado 400 mil personas que viven del transporte en Michoacán.
Además, abundó Pasalagua, de los que obtienen ingresos indirectos de transporte, como los mecánicos, checadores de ruta, refaccionarias, talacheras, llanteras, gasolineras y la industria automotriz, lo que los convierte, después del magisterio, en el segundo gremio de importancia en membresía del estado, con la diferencia de que los transportistas “enfrentan la complejidad de intereses encontrados en lo económico, social y político”.
Finalmente Martínez Pasalagua reiteró que la situación económica actual y la que se prevé para el próximo año pega también a los transportistas, que se suman al reclamo general de los ciudadanos de a pie.
“Ya basta, porque el hilo del que pende la prudencia de la población, está por romperse”, sentenció.
