Morelia, Michoacán
En vez de venir a Michoacán a dar a conocer un programa de entrega de fertilizantes, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, debió de haber hablado sobre los problemas de inseguridad que afectan a lo campesinos, como las minas enterradas que han llevado a varios a la muerte, observó el dirigente estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Guillermo Valencia Reyes.
“¿A poco creen que a la familia de Pablito o de José Luis les va a importar que les den fertilizante? Perdón, pero es una mentada de madre. Mejor miéntennos la madre y vamos a sentir menos feo”, cuestionó el priista, en alusión a los dos jóvenes que perdieron la vida tras pisar una mina.
Memo Valencia enfatizó que lo que los grupos criminales están buscando con estos actos es sembrar el terror, pues es poco probable que su intención sea acabar con sus rivales colocando minas en campos de cultivo y es cada vez más frecuente que mueran jornaleros por esta causa e incluso soldados.

Criticó que en su visita, la presidenta haya presentado el programa Cosechando Soberanía, pero no haya hecho ninguna mención al crimen organizado que asola las áreas rurales del estado, por lo que calificó como “patriotero” su discurso.
“¿Donald Trump, enemigo de México? No, señora presidenta, los enemigos de México son estos grupos que siembran muerte”, declaró.

“No conocen a mi niño, era un angelito”
Durante su rueda de prensa semanal, Guillermo Valencia se enlazó vía telefónica con Mayra, madre del niño de 15 años que falleció al ir a trabajar al campo en Buenavista, quien declaró que ninguna autoridad, ni federal ni estatal, se le ha acercado, ni tampoco personal de la fiscalía, pero sí han sugerido que tenía nexos con el crimen organizado.
“No conocen a mi niño. Mucha gene sintió su muerte porque no era vicioso, era trabajador. Apenas tenía 15 años. José Luis era un campesino igual que mi hijo, trabajador. Es de Colima y conozco a sus hermanos, ellos no andaban en malos pasos, ellos son campesinos como mi hijo”, explicó.

La señora corroboró lo dicho por el dirigente del PRI, al confirmar que en Buenavista no les interesa que les regalen fertilizante:
“Para mí es más importante que se pongana trabajar en lo de las minas. Eso que están regalando no importa. De qué sirve el regalo a los campesinos si uno no sabe si despierta mi niño y ya no vuelve a su casa”, lamentó.
Concluyó que no espera justicia, pues su hijo “ya es un angelito y está con Dios” y considera que lo que le sucedió fue un accidente.
Por su parte, Guillermo Valencia reprobó las declaraciones del fiscal general, Adrián López Solís, y el secretario de Seguridad Pública, Juan Carlos Oseguera, pues consideró que son revictimizantes.
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