Morelia, Michoacán
El director del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) en Morelia, José Manuel Álvarez Lucio, refirió que la capital michoacana requiere de lineamientos emitidos por la Federación y certidumbre en los datos proporcionados por esta, respecto de población migrante que arriba en su tránsito por territorio nacional.
Detalló que el ayuntamiento capitalino está en condiciones de proporcionar ayuda humanitaria de emergencia a los migrantes que, por distintos motivos, lleguen a la ciudad a la espera de regularizar su situación legal en el país.
Entre estos apoyos, destacó medicamentos, alimentación, ropa y cobijas; sin embargo, respecto de espacios para la pernocta de los migrantes, debido a que es el Instituto Nacional de Migración (INM) la instancia a cargo de ellos, se precisa de conocer los mecanismos para estipular con claridad responsabilidades y atribuciones, así como definir los protocolos de atención.
Y es que los albergues con que cuenta el municipio, entre los que mencionó la Estancia Diurna del Adulto Mayor y el auditorio del DIF en Morelia, son espacios en uso que se habilitan para atender situaciones de emergencia y se debe tener una estimación de las personas que se tendrían que recibir para asegurar un espacio y condiciones suficientes.
Actualmente el INM expresó al ayuntamiento de Morelia que no tiene certidumbre respecto de la cantidad de migrantes que podrían arribar a la ciudad y cuántos de estos podrían precisar de apoyo para tener un lugar para descansar.
Álvarez Lucio recordó que desde la detección de un grupo de migrantes centro y sudamericanos que descendieron de autobuses en el anillo periférico, instancias municipales procedieron a su atención de emergencia.
El pasado miércoles se llevó a cabo un operativo coordinado entre la Federación, el Estado y el Municipio para el traslado de los migrabtes que aún permanecían en Morelia, resguardados en las afueras de la Comisaría de la Policía Municipal.
No obstante, los migrantes refirieron que el traslado al albergue, operado desde la Arquidiócesis de Morelia, les implicaba no tener acceso a sus teléfonos celulares ni libertad de movimiento, por lo que aproximadamente 30 personas, incluyendo menores de edad, permanecen en la zona.
José Manuel Álvarez insistió en que hay claridad sobre el estatus legal de los migrantes, pero no sobre el tiempo que estos requerirán permanecer en Morelia, la clase de ayuda que necesitan y las atribuciones y competencias correspondientes a las diferentes instancias.
Aseveró que desde el municipio se mantienen acercamientos con el INM para definir estos pormenores y así poder brindar a la población migrante que arribe a Morelia las mejores condiciones, en tanto resuelven su tránsito o situación legal en el país.
