Claudia Sheinbaum Pardo ha hecho historia al convertirse en la primera mujer en alcanzar la Presidencia de México, una nación con 200 años de vida institucional.

Con ello, se convierte en la mandataria número 56 en la historia del país, y su victoria marca un nuevo capítulo en la política mexicana, consolidando la continuidad del proyecto de la Cuarta Transformación impulsado por Andrés Manuel López Obrador.

Sheinbaum logró el respaldo del electorado con un 57 por ciento de los votos, superando competidora más cercana, Xóchitl Gálvez, quien obtuvo el 41 por ciento.

La participación ciudadana en las elecciones fue clave, y este resultado refleja – según diverso expertos políticos – la solidez del apoyo a la ex jefa de Gobierno de la Ciudad de México, quien consolidó su campaña en torno a la continuidad de las políticas de López Obrador.

Uno de los mayores retos que enfrentará Sheinbaum es la seguridad. Recibe un país con 190 mil homicidios acumulados durante el sexenio de López Obrador. La violencia y el crimen organizado continúan siendo problemáticas que desafían la paz social.

Sheinbaum ha dejado claro que su prioridad será atender de manera inmediata las emergencias humanitarias. Un día después de recibir la banda presidencial, el miércoles 2 de octubre, se trasladará a Guerrero junto con su gabinete para coordinar la ayuda a los cientos de damnificados por el huracán John. Las acciones se centrarán en la recuperación del patrimonio de quienes perdieron sus hogares y bienes en este devastador evento natural.

El gabinete de Sheinbaum incluye una combinación de líderes experimentados y nuevos actores. Entre los nombres más destacados se encuentran: Rosa Icela Rodríguez, quien será ratificada como secretaria de Seguridad Pública, clave para enfrentar el reto de la violencia; Tatiana Clouthier, exsecretaria de Economía, quien asumirá un papel protagónico como jefa de la Oficina de la Presidencia, y Marcelo Ebrard, quien fue su principal contendiente en las internas de Morena, será el canciller de su administración.

Con este equipo, Sheinbaum busca dar continuidad a las políticas de su predecesor, pero también enfrentar nuevos desafíos que definirán su sexenio. Los estudios de opinión que se han dado a conocer, muestran que la expectativa es alta y que el país estará atento a las primeras acciones de la primera presidenta en la historia de México.

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