Foto: ACG

El gobernador de Michoacán insta a los productores a adoptar la nueva certificación que, en principio será voluntaria, pero que en el mediano y largo plazo, se avizora que será obligatoria para la exportación del fruto a a Estados Unidos.

En conferencia de prensa, el gobernador de Michoacán hizo un llamado a los productores de aguacate de la entidad para sumarse voluntariamente a la nueva certificación de aguacate libre de deforestación. Aunque por ahora es una medida opcional, Bedolla advirtió que en el futuro podría convertirse en un requisito obligatorio para ingresar al mercado estadounidense, en respuesta a las crecientes preocupaciones sobre el impacto ambiental de la agroindustria.

“Esta es la primera llamada a misa para los productores. Nos estamos anticipando a lo que podría ser una exigencia internacional. No queremos que el Gobierno estatal sea omiso ante el cambio climático. Continuaremos denunciando huertas en terrenos deforestados, y trabajaremos en este tema de manera constante todo el año y el próximo”, declaró el mandatario.

El nuevo sistema, que entró en vigor el pasado 29 de agosto, evalúa criterios como la no deforestación a partir de 2018, la ubicación de las huertas fuera de áreas naturales protegidas, y el uso adecuado de agua y agroquímicos. Para obtener la certificación, las huertas deberán demostrar que conservan una proporción mínima de bosque, con una relación de seis hectáreas de bosque por cada hectárea de aguacate cultivada. En el caso de huertas orgánicas, esta proporción se reduce a tres hectáreas de bosque por cada una de aguacate.

Además, el gobernador subrayó que esta iniciativa surge en respuesta a la presión de activistas ambientales, quienes enviaron una carta a autoridades estadounidenses solicitando el bloqueo del aguacate mexicano, debido a problemas de deforestación y a una reciente queja en el marco del T-MEC sobre el incumplimiento de normas laborales y ambientales.

“El embajador Ken Salazar ya envió un equipo para conocer el proceso de certificación, y hace unos días recibimos una carta en la que se reconoce el esfuerzo del gobierno estatal. Este documento será relevante no solo para el mercado estadounidense, sino para cualquier país que quiera garantizar que el aguacate que importa es producido de manera sostenible”, explicó Bedolla.

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