Y que se escuche la banda, que suenen los machetes, que salgan al paso los apaches, que se viva con alegría, porque el toro está en las calles y mañana empieza la penitencia.

Es martes 13, martes de Carnaval, y sobre las calles de la colonia Ventura Puente caminan el toro, su comparsa y decenas de paseantes que disfrutan de la tradición y la fiesta del torito de petate, a escasas horas del arranque de la Cuaresma católica.

Armados con machetes, espumas, confeti y, por qué no, cerveza, la compañía de El Aventurero de la Ventura Puente se apodera de las calles.

Vecinos salen a las ventanas y puertas de sus casas y negocios para ver pasar al toro, que entre apaches y un torito más pequeño, detiene el trafico y atrae las lentes de cámaras y teléfonos celulares.

Se deja oír la música de la banda y un “olé” es arrancado de alguna garganta, mientras El Aventurero baila para los asistentes, entre aplausos de los adultos y la mirada emocionada de los más pequeños.

En el último día de la fiesta de la carne, antes de que los fieles católicos comiencen el período de recogimiento y oración que les permitirá prepararse para acompañar a Jesús en su pasión y muerte, El Aventurero se la rifa con su colorido y su alegría, no exentos del recordatorio del final que habrá de alcanzar a todos.

Desde el pasado sábado 10 de febrero comenzó el recorrido de los toritos de petate, con el Festival del Torito de Petate, en la zona centro de Morelia.

El corte preliminar de la Policía de Morelia indicó que se encontraron en circulación de 40 a 50 toritos de petate, además de los 80 participantes en el festival.

Al menos dos riñas entre jóvenes presuntamente bajo los efectos del alcohol se registraron entre el 10 y el 13 de febrero.

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