Morelia, Michoacán
Con amenazas de muerte y engaños, asegura Rebeca Mejía que fue despojada de sus hijas el 29 de diciembre de 2021, a partir de un montaje preparado por una abogada de nombre Verónica G. V.
Todo ocurrió por la noche en menos de una hora, relata en una entrevista para Primera Plana Mx. Esa noche, Verónica le dijo que su expareja quería matarla y que tenía que salir de su casa para resguardar su integridad. Se presentó como trabajadora del DIF y llegó acompañada de otras personas.
Le pidieron apagar su celular y 20 minutos después esta abogada se presentó con la madre de Rebeca, para decirle que si no le entregaba a sus hijas, el cuerpo de Rebeca iba a aparecer flotando en un río y tendría que ir a reconocerla al Servicio Médico Forense, que ella la acompañaría.
Se salió con la suya, en realidad Verónica no era parte del DIF ni del Poder Judicial, ni de la Fiscalía, como aseguraba en sus visitas, era la abogada del esposo de Rebeca, quien buscaba venganza a raíz de que él le pidió el divorcio. El suyo no es un caso aislado, al menos se han detectado 10 víctimas de Verónica G., quienes tienen miedo de denunciarla porque asegura que “tiene comprado al Poder Judicial” y “está muy bien parada”.

“Es la principal violentadora vicaria en Morelia, varias mamás hemos sido víctimas de esta abogada, que trabaja de manera muy sucia. De manera ilegal se hace pasar por miembro del PJF, sus pasantes portan gafetes, se presentan a los domicilios como secretarios de acuerdos, como ministerios públicos, y de esta manera amedrentan, sorprenden a las mamás y sustraen a los niños”, detalló.
Tampoco es infrecuente que una expareja reaccione así, de acuerdo con Rebeca, quien forma parte del Frente Nacional contra la Violencia Vicaria, entre siete y ocho mujeres de cada 10 son víctimas de este tipo de violencia, que consiste en la intención de quitarle los hijos a las mujeres cuando deciden terminar una relación de pareja para dañarlas psicológica y emocionalmente.
“Fueron día muy devastadores para mí como mamá, el estar buscando a mis hijas, estarlas peleando, estarlas pidiendo por favor, de rodilas, y que mi suegra me dijera: ¿sabes qué? No, porque la abogada es poderosa es influyente y no te las voy a dar”, relata Rebeca.
En México, 17 estados del país tienen catalogada la violencia vicaria como un delito, pero Michoacán no es uno de ellos. Algunos jueces ni siquiera la reconocen como un tipo de violencia.

“Los jueces no tienen idea de lo que es violencia vicaria, yo he manifestado dentro de mi expediente que aún continúo dentro del juicio la vioencia vicaria y la juez no me da resultado, me dice que esa violencia no existe y que son cosas de mamás locas”, continúa la mujer.
A pesar de esto, Rebeca recuperó a sus hijas a los 27 días de la sustracción ilegal, ya que acudió al Centro Integral de Justicia para las Mujeres de la Fiscalía General del Estado (FGE). Es por ello que recomienda a otras victimas de esta violencia “seguir, insistir y persistir y no quedarse calladas, dejar de tener ese miedo”.
Ahora el proceso legal continúa, porque decidió demandar a Verónica G. V. por privación de la libertad y amenazas de muerte. “Busco un castigo para esta señora, no puede seguir operando”, enfatiza y está a la espera de que se obtenga la vinculación a proceso.
A pesar de ello, no deja de tener miedo, porque su expareja insiste en quererle quitar la custodia:
“Yo tenía un pánico terrible, decía ‘mis hija, me las van a quitar’. Aún sigue abogando en el juzgado por tener la custodia de mis hijas y es el mayor temor que tengo, que le den la custodia y se queden con el agresor”.

Mientras tanto, le permitieron verlas en el Centro de Convivencia para Familias, pero él decidió que sólo le interesaba ver a su hija menor y metió un escrito al juzgado para que no le llevaran a la mayor.
Urge visibilizar este tema, considera, a modo de conclusión Rebeca, porque muchas mujeres no saben que están siendo víctimas de violencia vicaria. Se debe insistir al Congreso del Estado para que se tipifique y por lo pronto buscar medidas cautelares en los juzgados, porque las consecuencias psicológicas para los hijos son considerables. Se dice que la ley está a favor de las mujeres y los niños, pero ella no lo considera así:
“Existe mucho la teoría de que la mujer está protegida, que el interés superior de los niños está en los juzgados, pero es pura teoría, en la práctica como mamá te encuentras con muchísmas trabas. A los deudores se les da mucho tiempo, se les dan prórrogas, se les chiquea […] No hay una medida estricta para que se logre el pago de las pensiones. Caso contrario, hay mamás a las que por no cumplir dos meses, las embargan”.
Las víctimas de violencia vicaria pueden comunicarse por Facebook con el Frente Nacional contra la Violencia Vicaria, en donde serán canalizadas con mamás como ellas de su localidad, que conforman este frente.